La magia del trabajo de un artista radica en la capacidad que tiene de transformar cualquier objeto en algo maravilloso. En el caso de Ciclotrama, instalación de Janiana Mello y Daniel Landini, la magia ocurre usando sogas comunes.
Ambos son capaces de convertir las sogas en una serie de árboles ya sea al entrelazarlas o deshacerlas. Su arte no solo se centra en un solo objeto sino que abarca todo lo que lo rodea creando un espacio casi de fantasía para el visitante.
Desde su aparición en el 2010, Ciclotramas ha ido creciendo mientras que ambos artistas experimentan no solo con el material sino también con texturas, efectos y colores.