El VAR en la final, por Pedro Ortiz Bisso

Juliaca será hoy escenario de un hecho histórico. Además de que Binacional y Alianza Lima se enfrentarán por primera vez en busca de determinar al mejor equipo de la temporada 2019, los árbitros designados para administrar justicia en el Guillermo Briceño tendrán la ayuda del VAR.

No son pocos los futbolistas, entrenadores, dirigentes, hinchas y periodistas que aborrecen la videovigilancia arbitral. Su mayor queja es que le quita dinámica a un deporte que había asumido el error como parte de su desarrollo.

¿Pero por qué vivir con el error si la tecnología puede ayudar a minimizarlo? Esa es una pregunta que quienes detestan este sistema suelen responder parafraseando al Puma Carranza: porque el fútbol es el fútbol.

Durante décadas, el deporte rey ha dado cabida a cientos de situaciones injustas que hoy, con la ayuda del ‘Video Assistant Referee’, pueden reducirse a su mínima expresión. No es un sistema perfecto, aún tiene problemas de ‘timing’ e interpretación, pero aclara situaciones controversiales y brinda las herramientas visuales necesarias para evitar que se premie o castigue a quien no lo merece.

El 2019 no ha sido un buen año para la Liga 1. Los reclamos por los fallos arbitrales han sido constantes, generando dudas sobre las razones detrás de tantos desaciertos. La tecnología puede ayudar para que, al menos en los últimos partidos del 2019, los resultados no admitan sospechas.