El técnico del Flamengo, Vanderlei Luxemburgo, criticó hoy con dureza a la Federación de Fútbol del Estado de Río de Janeiro (FERJ), a la que tildó de tomar actitudes "propias de una dictadura", y finalizó una rueda de prensa con un adhesivo en la boca, a modo de mordaza, como forma de protesta.
La original actitud del ex entrenador del Real Madrid tuvo lugar durante una conferencia de prensa y fue una reacción a la sanción que le impuso la FERJ, y que le prohíbe dirigir al equipo el domingo, cuando Flamengo se enfrentará al archirrival Fluminense, en el estadio Maracaná, por el Campeonato Carioca.
"La democracia fue conquistada a través de luchas del pueblo brasileño. Estas luchas acabaron con la dictadura y nos dieron el derecho a expresarnos sin represión. No puede, en 2015, un órgano importante de Río de Janeiro, de un deporte importante como lo es el deporte del pueblo brasileño, volver a vivir un momento (propio) de dictadura", expresó Luxemburgo.
Aclaró, asimismo, que sus palabras no fueron contra el presidente de la Federación Rubens Lopes, sino contra la entidad "y contra cualquier federación que impida a los jóvenes jugar al fútbol".
"Voy a continuar criticando lo que crea que tiene que ser criticado, con mis movimientos en el fútbol para que, a los 63 años, pueda a vivir con libertad, y mis nietos y mis nietas puedan vivir en un país con más libertad aún. ¡No me van a callar! Si me quieren sacar el Campeonato Carioca, que me saquen", disparó Vanderlei Luxemburgo.
Fue en ese momento que el entrenador tomó una cinta adhesiva y dijo: "No voy a manifestarme hasta que tenga nuevamente mi derecho a la libertad". Tras pegarse la cinta en la boca, se levantó y se retiró de la sala de prensa.
La polémica de Luxemburgo con la FERJ se enmarca en una "guerra" que libran contra la entidad tanto Flamengo como Fluminense. Ambos clubes cariocas vienen coordinando acciones para reformar la estructura de la federación, en un intento por darle más poder a los clubes.
FUENTE: DPA