Los precios del cobre subían este jueves ya que los inventarios disponibles en depósitos de la Bolsa de Metales de Londres (LME) se redujeron a un quinto de su nivel de hace dos meses, y una subida en el costo del metal para entrega inmediata apuntaba a un mercado más ajustado.
A las 1104 GMT, el cobre a tres meses en la LME subía un 0,7% a US$6.533 la tonelada, avanzando hacia el máximo de dos años de US$6.633 al que trepó la semana pasada.
El metal rojo ha repuntado desde un piso de US$4.371 al que cayó en marzo. Los esfuerzos de China para estimular a su economía con infraestructura apoyará los precios, dijo Kieran Clancy, analista de Capital Economics. “La trayectoria general de los próximos 18 meses es alcista”, afirmó.
Los inventarios on-warrant en depósitos registrados ante la LME bajaron a 55.950 toneladas luego de 10.225 toneladas de cancelaciones. Cerca de 250.000 toneladas estaban on-warrant a mediados de mayo.
La prima por el cobre al contado en la LME sobre el contrato a tres meses saltó a un máximo de 16 meses de US$24,50 la tonelada, señalando un suministro próximo más reducido. En mayo, el cobre al contado estaba con un descuento de US$30 respecto al contrato a tres meses.
Los trabajadores de la mina Zaldívar y la chilena Antofagasta, una de las mayores productoras mundiales de cobre, decidieron la noche del miércoles extender una mediación con el gobierno para intentar acordar un nuevo contrato colectivo y evitar una huelga en el yacimiento.
Las bolsas europeas subían ya que resultados corporativos mejores a lo previsto compensaban la preocupación por el aumento de casos de COVID-19 y la tensión entre China y Estados Unidos.
Sondeos mostraron una creciente confianza entre consumidores y empresas y Francia y Alemania, pero Corea del Sur se hundió en una recesión en el segundo trimestre.