El proyecto de ley 679, que establece una tarifa nivelada de gas natural a nivel nacional para todos los usuarios regulados y que ya ha sido elevado al Pleno del Congreso para su aprobación final, es vital y necesario para la masificación del gas natural en el Perú. Sin embargo, aparentemente, algunos detractores pretenden frenarlo. La iniciativa tiene como objetivo principal la construcción de redes y la atención de nuevos usuarios residenciales para las concesiones actuales y futuras. De acuerdo con la propuesta derivada al Pleno, la nivelación de la tarifa comprende a los usuarios que consumen hasta 900.000 m3/mes del recurso, incluyendo hogares, estaciones de GNV, comercios e industrias pequeñas y medianas. Es este umbral el que hará posible la construcción de nuevas redes, necesarias para llevar el gas natural a casi todas las regiones del Perú. Se trata de un subsidio cruzado que el Estado debe rmonitorear, egular y supervisar.
¿Por qué dicho umbral es tan importante? Porque permitirá captar como clientes a medianas y grandes industrias y comercios, cuya demanda es trascendental para la masificación del recurso en hogares, en el marco del subsidio cruzado, a través del cual se cobran, más allá de la tarifa nivelada, recargos a los usuarios con mayor consumo para beneficiar a los hogares con una menor tarifa y construir así nuevas redes. Es decir, el aporte y mayor volumen contratado por estos consumidores es el que permitirá obtener los recursos económicos que se requieren para aumentar las inversiones en infraestructura. El Congreso debe ser consciente de ello y entender que, de nada sirve contar con una tarifa nivelada si no llega a la mayoría de los actores en regiones, cuando, sin redes y sin grandes consumidores, el recurso no se masificará aceleradamente, como se busca. Solo si la tarifa nivelada va de la mano de la construcción de redes veremos reales efectos en la economía de los peruanos de las diversas ciudades del interior, no solo de Lima e Ica, principalmente de los hogares más vulnerables, tal y como ya sucede en Lima y el Callao.
El Congreso tiene una tarea pendiente, desde hace un año, permitir que las condiciones de precio de gas natural y oportunidad que tienen Lima y el Callao con este recurso también lleguen a las regiones o departamentos con lo que se llama la tarifa nivelada. Pero, para ello, es trascendental debatir en esta legislatura el proyecto de ley que permitirá que la matriz de gas natural se descentralice, a fin de cerrar brechas de desigualdad en infraestructura con el interior del país. Lo que significa que hoy no tienen todos los peruanos las mismas oportunidades. Avancemos hacia una Transición Energética justa y eficiente.