Tus principios son caros (parte II), por Alberto Goachet
Tus principios son caros (parte II), por Alberto Goachet
Redacción EC

Hace dos semanas escribí sobre el significado de la frase “tus principios no son principios hasta que te cuestan algo importante”, y como hoy la sociedad exige a las marcas tomar una posición ante los acontecimientos, con implicancias de ganar o perder adeptos y, por consecuencia, ganar o perder negocio. Las ya no son simplemente un producto o servicio que se mantiene neutral como espectador, sino que están obligadas a tomar partido en base a sus culturas empresariales y sus valores. 

Este rol como un ciudadano más se ha dado en temas controversiales: el matrimonio de personas del mismo sexo en Estados Unidos, o su apoyo a personajes controversiales de los medios de comunicación, como ocurrió hace dos semanas acá. Pero la última semana este rol activo y gravitante en la sociedad demandó a las marcas ir más allá.

Los efectos de El Niño costero han sacado a relucir de manera contundente el espíritu solidario de todo un país. Una solidaridad abrumadora, transversal a edades, niveles socioeconómicos y geografías. Y diría que hasta a posiciones políticas, con ciertas excepciones.

Y en estos momentos en que todos se ponen de pie, hay marcas que están también diciendo presente. Dentro de sus áreas de acción pusieron el hombro, con los costos que ello implica, considerando que es una coyuntura donde también el desastre los impacta a nivel de negocio.

Medios de comunicación, empresas de telefonía, gremios bancarios, cadenas de supermercados, empresas de consumo masivo y muchas más se sumaron a la cruzada de ayuda que los peruanos abrazamos como algo no negociable. Hay voces que critican cuando una marca comunica esto, tildándolo de protagonismo calculado para salir en la foto. A estas voces les digo que están equivocadas. Las marcas cuando ayudan deben salir en la foto. ¿Por qué? Porque nosotros les exigimos dar un paso al frente en momentos tan difíciles. Queremos verlos. Ayudar con perfil bajo es respetable y entendible, pero no es adecuado si queremos demostrar como marcas y empresas nuestro compromiso y nuestra cuota de ayuda cuando más se necesita.

Si más empresas y marcas ayudan para salir en la foto, más gente va a ser beneficiada, y nadie puede estar en contra de esto. No se trata de alardear, sino de evidenciar de manera genuina y humilde, sin exceso de protagonismo. Y este espíritu solidario contagia a otras marcas.

El Perú nos ha dado mucho en las últimas décadas: un país estable, en crecimiento, atractivo ante el mundo, ideal para cumplir nuestros sueños. Hoy sufre y nos toca a todos darle mucho en agradecimiento y, por ende, ayudar a todos nuestros hermanos que lo necesitan. Las marcas deben unirse a esta causa y lo están haciendo. Es lo que exige tener principios. Es lo que les exigimos para conocer de qué están hechas. Y en el trayecto, para saber también de qué estamos hechos nosotros, los peruanos.

Lee más noticias de Economía...