Según proyecciones de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), la economía de Venezuela tendría un crecimiento de 10% en 2022 y lideraría el avance de la región. Aunque son obvias las implicancias reales de dicha cifra, resulta oportuno recordar la situación económica venezolana.
Los datos de la CEPAL indican que el PBI de Venezuela se redujo en 64% entre 2012 y 2019. Con la llegada de la pandemia, su economía cayó un 30% extra en 2020. En 2021, Venezuela volvió a caer otro 3%, mientras que las economías de la región recuperaban sus niveles prepandemia. En acumulado, el producto venezolano se redujo a un cuarto en 10 años, la peor crisis de un país que no está en guerra desde la década de los setenta según Kenneth Rogoff, profesor de la Universidad de Harvard. Por lo tanto, crecer a doble dígito en 2022 es una buena noticia, aunque claramente el impacto económico es mínimo.
El PBI por habitante es una medida que, con sus pros y contras, refleja el desarrollo de un país. Producto de la crisis económica, un venezolano promedio logra apenas US$1,800 dólares por año, lo cual significa un retroceso de 50 años en el nivel desarrollo y representa casi un cuarto del ingreso promedio de un peruano (US$ 6.900). Si la economía llanera crece 10% de manera sostenida, a los venezolanos les tomaría casi cinco años recuperar el ingreso promedio del 2019 (US$ 2.600) y 15 años el pico del 2012 (US$ 6.900).
Cuando los ingresos se desplomaron, la pobreza en Venezuela se disparó. Al cierre del 2021, el 94.5% de los venezolanos son pobres y el 76.6% son pobres extremos. Para poner estas cifras en perspectiva, y aún cuando no son estrictamente comparables, la pobreza total en el Perú es de 25.9% y la pobreza extrema de 4,1%. Usando el escenario de crecimiento sostenido de la economía venezolana de 10% por los siguientes cinco años, la pobreza total en 2027 apenas bajaría a 90%.
Ahora bien, ¿qué tan probable es que un país crezca 10% de manera sostenida? Bastante difícil. Recientemente, solo China logró dicho crecimiento promedio entre 1990 y 2010. En ese sentido, el conceso de analistas esperan que el crecimiento de Venezuela para los siguientes años se ubique entre 4% y 6%. Bajo ese escenario más realista, la recuperación venezolana tomaría algunas décadas.
Valdría la pena recordarles a varios líderes de Perú Libre y de la izquierda radical que una golondrina no hace el verano.