El presidente de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), Andreas von Wedemeyer, expuso un conjunto de cuatro medidas económicas a fin de complementar las consideradas por el gobierno en las facultades legislativas.
Según el gremio, aunque el primer paquete simplificador del Ejecutivo es positivo, aún es necesario incluir acciones para ayudar a cumplir las metas económicas a largo plazo, como simplificar, formalizar y reactivar la economía peruana.
Las propuestas del gremio son:
► Inaplicar todas las barreras burocráticas declaradas ilegales o irracionales por Indecopi, tanto las ya identificadas al año 2016, como las que se identifiquen a futuro.
► Impulsar el uso racional y extendido de Silencio Administrativo Positivo en todos los ámbitos de la administración pública.
► Promover el crecimiento empresarial a través de la extensión del Régimen Especial de la Renta a toda micro, pequeña y mediana empresa, con criterios de gradualidad (venta anual hasta S/9 millones; costo fiscal: 0,2% PBI).
► Racionalizar los sistemas de fiscalización (tributaria, laboral, ambiental, municipal) con la aplicación de: i) Cuadrante inspectivo; ii) Criterio de Cosa Juzgada; iii) Límite de frecuencia de inspecciones por establecimiento; iv) Sustento técnico de las tablas de sanciones y no aplicación de multas si este sustento no existe; e v) Ingresos por multas direccionados hacia el Tesoro Público y no a la entidad fiscalizadora.
REFORMA LABORAL
La SNI enfatizó que, en la actualidad, el 70% de peruanos no cuentan con empleo formal debido a la alta rigidez regulatoria. Por ello, destacaron que la informalidad laboral es un aspecto importante que no deberá dejarse de lado.
En ese sentido, saludaron los trabajos que viene realziando el Ministerio de Trabajo para simplificar los contratos temporales. "Nuestra idea es promover el dialogo social, para llegar a medidas que reduzcan significativamente el empleo informal y nos hagan más competitivos como país”, agregó von Wedemeyer.
Asimismo, la SNI destacó que las tareas pendientes son la baja competitividad del país frente a nuestros principales socios comerciales y a la OCDE y una elevada informalidad laboral, con más de 11.5 millones de personas sin acceso a derechos laborales.
“En esta compleja coyuntura, la aplicación de reformas en el Perú no es una opción, sino una necesidad para generar competitividad, aumentar formalidad y retomar la senda del crecimiento y desarrollo”, puntualizó el gremio.