Kenyi Coba
A pocos días de la cena de Nochebuena, muchas familias evalúan diversas recetas para cocinar y agasajar a sus invitados en este evento de Navidad.
Si todavía no sabes qué preparar, no te preocupes porque la cocinera Ximena Llosa comparte contigo la receta de una jugosa y deliciosa pechuga de pavo al horno.
Con ingredientes básicos, un fácil procedimiento y mucho sabor, la conductora de 'Ximena en casa' (Movistar TV) indica que esta pechuga horneada será la sensación en tu mesa.
Ingredientes: 1 pechuga de pavo con hueso, 4 dientes de ajo molidos, 4 cucharadas de mostaza, 1 cucharada de comino, 50 gramos de mantequilla, 2 cucharadas de aceite de oliva, ½ taza de vino blanco, ½ taza de sillao, 2 litros de caldo de pollo, 3 limones, 2 naranjas, 1 zanahoria, 2 ramas de apio, 1 cebolla roja, maicena (cantidad necesaria), sal y pimienta al gusto.
Preparación: Utilizando tus dedos, separa la piel del pavo y salpimenta bien la pechuga. Déjala reposar. En un bowl, mezcla los ajos, la mostaza, el comino, el jugo de los limones, las naranjas exprimidas, el sillao e intégralos bien.
Una vez listo el aderezo, embadurna la pechuga con tus manos y debajo de la piel, coloca pedacitos de mantequilla para que la carne obtenga más sabor.
“Cuando la pechuga ya esté marinada, déjala reposar de un día para otro o si puedes, que sean dos noches antes de meterla al horno. Así absorberá todos los sabores de los ingredientes y no quedará seca”, recomienda Ximena.
Antes de asarla, pica en cubos pequeños la zanahoria, apio y cebolla y saltéalas en una sartén. Sazónalas con sal y pimienta, deja que cocine durante 10 minutos. Después de ese tiempo, añade el vino y déjalo que se evapore.
Incorpora el caldo de pollo y deja que dé un hervor. Luego, baña la pechuga con esta preparación por ambos lados y déjala reposar por un momento.
Utilizando una asadera, coloca la pechuga en el horno y deja que cocine lentamente por una hora y media (aproximadamente) a una temperatura de 325° F. Durante este proceso, es necesario que vayas bañando la pechuga con los jugos que bota, así como el caldo de pollo que pudo haberte quedado.
“Todo depende del peso del pavo. Lo ideal es tener un termómetro para carnes, el cual se inserta dentro de la pechuga y debe tener una temperatura interna de 165° F (74 °C) para que esté listo. Es recomendable colocarlo en la parte más gruesa de la pechuga para tomar la temperatura correctamente”, indica la también presentadora de televisión.
Ya cocida, cuela los jugos de la preparación y espésalos con un poquito de maicena antes de servir. Sirve la pechuga en tajadas delgadas junto a la guarnición de tu preferencia, la cual puede ser complementada con la salsita caliente de los jugos. ¡A disfrutar!