El embarazo es la etapa donde las gestantes esperan con ansias la llegada de su bebé. Es por ello, que durante la dulce espera es importante que la mamá esté preparada para ese momento y tenga una actitud positiva frente al parto. La psicoprofilaxis y estimulación prenatal es fundamental para el bienestar de la gestante como del niño que está por nacer. En esta nota, te decimos qué actividades puedes realizar desde la comodidad de tu hogar.
Pensar en el día del parto puede generar en las madres ansiedad y miedo. Ese sentimiento incrementa cuando esta no va preparada física y mentalmente para dar a luz, lo que genera una experiencia muchas veces traumática, porque no sabe cómo manejar ese momento. Si la madre no está preparada puede haber un aumentar las tasas de cesaría, traumas obstétricos, lesiones en el suelo pélvico y desgarros vaginales, porque no hubo un pujo adecuado. Los ejercicios ayudarán a la gestante manejar la ansiedad, aminorar el dolor de parto, hacer una correcta técnica de respiración y crear una ambiente de relajación.
Evelyn Campos, ginecóloga de la Clínica Ricardo Palma explica en qué consiste la estimulación prenatal. “Es la preparación integral de la gestante y se les da una serie de herramientas que le van a brindar a la paciente teoría, preparación física como el aspecto psicoafectivo. Se encamina a preparar a la paciente al momento del parto y las semanas posteriores a ello”.
Hay una serie de beneficios para las gestantes, ya que desde antes del parto va conociendo aspectos que se generan durante su gestación y van normalizando los cambios. “Disminuye los niveles de ansiedad, disminuye mucho la tasa de cesarías, hay menos incidentes en pacientes que realizan la psico profilaxis desde etapas tempranas y son más cocientes de todo lo que conlleva la gestación. Además, desde el punto de vista psicológico y físico afectivo se integra la participación de la pareja lo que crea un vínculo importante del papá con el bebé.
La etapa indicada para realizar la estimulación prenatal es terminando el segundo trimestre para ingresar al tercero, entre las semanas 22 y 24. Asimismo, cabe resaltar que todas las gestantes lo pueden hacer, excepto las que han llevado un embarazo de alto riesgo.
“La preparación física no se debería hacer, pero es importante que escuchen la teoría y la integración de la pareja, porque se les enseña ejercicios que les ayudará con la respiración. Así como las posiciones que les ayudan a disminuir el dolor, ejercicios para el dolor de la espalda como para el piso pélvico. Lo puede llevar cualquier paciente, pero los que están en riesgo deberían abstenerse dependiendo de la indicación de su médico”, detalla Campos.
Cuatro ejercicios que puedes hacer en casa
Posición buda: Es importante estar sentada encima de una colchoneta o tapete y tener la espalda recta. No se recomienda hacer este ejercicio encima de la cama. Las plantas de los pies tienen que estar juntas y colocar la mano encima de ellas. En ese momento, se tiene que subir las rodillas e inspirar al mimo tiempo y cuando las bajes, exhalar lentamente. Con este ejercicio se aperturará en canal de parto.
Postura de gato: Como el nombre lo dice, la gestante debe realizar la postura de un gato. Los brazos deben estar a la altura de los hombros y las rodillas bien separadas. A la hora de inspirar el mentón tiene que ir junto al pecho, al hacerlo la columna estará en forma curva. Luego, al expirar se vuelve a la misma posición. Este ejercicio es para aminorar el dolor de espalda.
Fortalecimiento dorso sacro: La gestante debe estar sentada con las piernas cruzadas. Se gira ligeramente el cuerpo hacia el lado izquierdo con el brazo derecho agarrando la rodilla de ese lado. Lo mismo se hace a la hora de girar hacia el lado derecho. Todos los ejercicios se realizan inspirando y exhalando.
Posición acostada: Este ejercicio la mamá ejercitará la parte inferior de su cuerpo, para ello debe estar en posición cubito lateral. Deberá alzar la pierna derecha ligeramente y girarla hacia la derecha e izquierda, de la misma forma del otro lado de la pierna.
Movilización de pies: En este ejercicio es importante el acompañamiento de la pareja para que sostenga a la gestante. La mamá debe alzar ligeramente el pie y girarlo tres veces, lo mismo se hace con el otro lado del pie. Al realizar este ejercicio evitará los calambres y el hinchazón del pie.