El ex presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF) Manuel Burga, extraditado a Estados Unidos la semana pasada para ser juzgado por corrupción en el marco del escándalo de la FIFA, fue liberado hoy bajo fianza en Nueva York, constató AFP.
Tras comparecer ante la jueza Pamela Chen y esperar por horas la llegada de varios documentos, Burga salió caminando de la corte federal de Brooklyn y levantó los brazos al cielo en señal de libertad.
La fiscalía no respondió a varios llamados de la agencia AFP para obtener detalles de la fianza, pero una portavoz precisó por correo electrónico que como Burga se declaró inocente, recién volverá a comparecer en la corte durante su juicio, cuyo inicio está previsto el 6 de noviembre de 2017.
Estados Unidos acusa a Burga de recibir sobornos por parte del argentino Alejandro Burzaco (dueño de la cadena Torneos y Competencias) a cambio de entregar, junto a otros dirigentes, los derechos televisivos de varias ediciones de la Copa América.
Burga será procesado en Estados Unidos por "asociación para cometer delincuencia organizada en agravio de ese país", precisó el dictamen del Ministerio de Justicia peruano, que autorizó la extradición.
La justicia estadounidense también quería juzgarlo por los delitos de lavado de dinero y fraude electrónico, pero la justicia peruana solo autorizó su extradición en base al primer delito de asociación para delinquir.
Burga asegura que es inocente y que no recibió ni entregó sobornos cuando estuvo al mando de la FPF, entre 2002 y 2014.
"Soy inocente, no tengo nada que devolver", dijo el ex dirigente deportivo en marzo pasado.
En total, 40 ex jerarcas del fútbol y empresarios deportivos fueron acusados por la justicia estadounidense de solicitar y recibir decenas de millones de dólares en sobornos y comisiones, en el marco del escándalo que generó una inmensa crisis en la FIFA y tumbó a su jerarquía, incluido a su ex presidente Joseph Blatter.
La mayoría se han declarado culpables y aceptaron cooperar con la justicia de Estados Unidos a cambio de una posible reducción de su condena.
Quedan solo seis que se han declarado no culpables y que serán juzgados desde el 6 de noviembre de 2017.
Un total de siete acusados están fuera de Estados Unidos y pelean su extradición.
Fuente: AFP