La Sociedad Peruana de Pediatría se pronunció, a través de un comunicado, en contra de la salida de los menores de 14 años a la calle y los espacios públicos durante la cuarentena, ya que se les estaría exponiendo “a mayores riesgos” ante la propagación del coronavirus (COVID-19).
“Desde el punto de vista epidemiológico, aún se está produciendo un número importante de casos nuevos cada día, asociado a un significativo número de muertes. Las cifras señalan que la curva epidémica aun no llega”, indicó este domingo la Sociedad Peruana de Pediatría en su pronunciamiento.
"Los niños se comportan como portadores asintomáticos, lo que lleva al incremento de la transmisión a adultos y adultos mayores, con el consecuente aumento de la mortalidad, tal como se ha visto en países que implementaron estas medidas en similares condiciones y, que a los 15 días, elevaron en 30% los casos de infección en población de 0-19 años y la necesidad de camas UCI", agregó.
Además, recordó que hay grupos poblacionales que no han respetado estrictamente las medidas de confinamiento y distanciamiento social. “Poblaciones con condiciones socioeconómicas más vulnerables e infraestructura urbana más riesgosa que propicia mayor diseminación del COVID-19, incrementándose el riesgo del contagio”, afirmó la Sociedad Peruana de Pediatría.
Por ello, recomendó a los padres de familia abstenerse de sacar a los niños fuera de su domicilio hasta que mejoren las condiciones epidemiológicas. “Solicitar al Minsa diferir sus recomendaciones hasta que la curva epidemiológica señale claramente que la transmisibilidad ha disminuido y que existe menos posibilidad de contagios”, expresó.
También planteó implementar una salida focalizada, progresiva y parcial para aquellos distritos, ciudades y regiones en los que estén controlados los casos COVID-19.
¿Cómo se contagia el coronavirus?
El COVID-19 se contagia por el contacto de una persona sana con otra que esté infectada. Esta enfermedad se propaga de persona a persona mediante las gotículas procedentes de la nariz o boca cuando el que se encuentra enfermo tose o exhala.
En muchos casos, estas gotículas caen sobre objetos o superficies, que después tocan otros individuos y se llevan a la nariz, ojos o boca cuando pasan sus manos por la cara.