:quality(75)/arc-anglerfish-arc2-prod-elcomercio.s3.amazonaws.com/public/UNYO2GGWYVAPRIKTK32H6YH6O4.jpg)
Un total de 267 galerías de todo el mundo y cerca de 4.000 artistas consagrados y emergentes presentan sus selecciones de arte moderno y contemporáneo esta semana en el centro de convenciones de Miami Beach, durante la décimo tercera edición de Art Basel.
Los organizadores prevén que unos 70.000 visitantes recorrerán este año la exposición de pinturas, esculturas, dibujos, instalaciones y fotografías, considerada la más importante de las Américas.
Pablo León de la Barra, quien ha curado más de 12 exhibiciones en la última década, tiene desde hace un año el trabajo de seleccionar las piezas de arte latinoamericano que se exhiben en el Museo Guggenheim de Nueva York.
El curador de origen mexicano recorrió Art Basel Miami en compañía de BBC Mundo para indagar qué está ocurriendo en el arte latinoamericano.
Según él, es importante entender cómo los artistas se aproximan a sus contextos a través del arte; no como un objeto de lujo, sino como un mecanismo que comunica la sensibilidad del artista con la realidad y sus intereses.
He aquí su selección.
Milena Muzquiz (Tijuana, 1972)
"Ella es definitivamente una de las artistas latinoamericanas más interesantes de observar", dice León de la Barra.
Para el curador del Guggenheim es muy importante el hecho de que Muzquiz haya nacido en la ciudad de Tijuana, en el límite entre México y Estados Unidos: "Su trabajo refleja esa mezcla, ese cruce de fronteras", asegura.
Muzquiz realizó arte en vivo (performance) durante 20 años, cuando formó parte del dúo musical Los Super Elegantes junto al argentino Martiniano López Crozet.
Ambos, a través de los ritmos, combinaban la estética de los mariachis con la música pop y la influencia californiana. Ahora, según León de la Barra, Muzquiz hace lo mismo a través de la cerámica.
Para Art Basel Miami, la artista presenta jarrones tridimensionales de cerámica con distintas formas y colores.
Ella misma los describe: "Son piezas teatrales con mucho movimiento. En ello han influido los años que estuve sobre la tarima".
"Para mí los floreros son una especie de escenario para la naturaleza. Me entusiasma la idea de crear un diálogo distinto con aquellas cosas que comúnmente están presentes en los hogares de la gente", apunta.
Cibelle Cavalli (Sao Paulo, 1978)
Su propuesta en esta edición de Art Basel es una de las más coloridas de toda la feria. Se trata de una carpa cerrada convertida es una especie de club nocturno.
La cantante, compositora y artista de performance Cibelle Cavalli lo define como un lugar "para hacer lo que queramos, para dejar atrás las ideas preconcebidas sobre cómo se supone que debemos comportarnos".
Las personas que acceden a entrar, son invitadas a bailar, a desinhibirse.
"Es una amazonia contemporánea. Un espacio para la apertura. Creo que nos restringimos demasiado, juzgamos a los demás", explica a BBC Mundo.
La exhibición, según el curador, es una crítica la sociedad de consumo y al hecho de que "el mundo se haya vuelto extremadamente cómodo y material".
En opinión de la artista, mientras eso continúe, "no habrá paz".
David Zink Yi (Lima, 1973)
Este artista peruano radicado en Berlín ha trabajado con video, fotografía y escultura.
En esta ocasión, presenta una selección de distintos trabajos. El primero es una intervención arquitectónica con relieves de figuras geométricas hechas en cemento.
"El material más barato, pero también el de la modernidad", dice León de la Barra. "David Zink Yi aprovecha la oportunidad para explorar la tradición abstracto geométrica del arte, que fue muy popular a mediados del siglo XX en todo el continente americano".
Las dos obras restantes son una impresión a color que resultó de la investigación visual que realizó para la Bienal de Berlín 2014 y Pneuma, un loop de 16 milímetros.
En ese video de una sola toma, un músico cubano se aproxima al campo de nitidez de la imagen, se prepara respirando tres veces y toca una nota por todo el tiempo que le permite el volumen de aire que tiene en sus pulmones.
"Es un trabajo muy dramático, tiene que ver con el dilema de que un momento de expresión tiene que perecer, para que se pueda generar otro", explica el artista.
Tania Candiani (Ciudad de México, 1974)
Para León de la Barra, Tania Candiani plantea una nueva mirada del conflicto entre tradición y modernidad, un asunto que suele estar presente en el arte latinoamericano.
Su trabajo, las propias palabras de la artista, está relacionado con el rescate de tecnologías del pasado que han desaparecido o están a punto de hacerlo.
La instalación que presenta en Art Basel Miami está compuesta por una tejedora, de las primeras mecanizadas, que posee las mismas tarjetas perforadas que usaba el telar de Jacquard (el primero que usó el sistema binario para dar órdenes a una máquina textil).
La máquina fue transformada por Candiani en una caja de música, con la que los visitantes pueden interactuar.
"Lo que en el pasado fue una novedad, hoy forma parte de la tradición y el folklore", destaca el curador.
Ishmael Randall Weeks (Cusco, 1976)
Este artista peruano, de padres estadounidenses, presenta una serie de instalaciones urbanas en esta edición de la feria.
La favorita de León de la Barra es una columna en construcción que de alguna manera refleja el proceso latinoamericano. Es una metáfora del futuro que se está moldeando, la transición hacia otra cosa.
"Utiliza cerámica de baño, para hacer la escultura, que en medio tiene libros con títulos como 'La democracia volátil' o 'La historia de las drogas' en la región. La construcción es robusta y frágil a la vez", explica el curador.
"Los artistas no pueden negar la realidad compleja en la que habitan, ni ausentarse del contexto político y económico de sus países. Siempre está presente", agrega.
Randall Weeks, quien ha trabajado por más de 20 años en Perú, destaca que lo que más le gusta es realizar obras con las que la gente se pueda relacionar.
"Un arte que se pueda sentir".
