Enrique Bernales. (Foto: archivo El Comercio)
Enrique Bernales. (Foto: archivo El Comercio)
Redacción EC

Enrique Bernales tuvo una importante labor como difusor cultural y  gestor de Romanza, institución que promueve la música lírica en el Perú. Su muerte, a los 78 años de edad, representa una gran pérdida para el arte y la política de nuestro país. 

Hace algunos años, en entrevista con El Comercio, Bernales explicó que decidió crear Romanza para continuar con el estilo de difusión cultural y social de la fenecida Asociación Prolírica del Perú.

Con Romanza, Enrique Bernales buscaba resaltar los talentos locales, como Ernesto Palacio, Francesco Petrozzi, Juan Diego Flórez, entre otros.

Hijo del profesor Luis Bernales, Enrique narró que la música siempre fue parte de su vida. En su domicilio en el jirón Junín, en los Barrios Altos, siempre se armaban serenatas.

"Venían conjuntos a tocar y mi padre bailaba la marinera limeña con una elegancia que ya quisiera yo tener [risas]. Creo que existe un gran parecido entre la música criolla clásica, de los años veinte y treinta, y ciertas partes de la zarzuela. Hay un vínculo interesante", señaló al respecto el recordado difusor cultural. 

Dueño de una impresionante colección de discos de música clásica, en 1987 fue nombrado por las Naciones Unidas como relator especial de la Comisión de Derechos Humanos en Ginebra. Ello lo llevó a cumplir comisiones en distintas partes del mundo.

VIDA POLíTICA

Enrique Bernales Ballesteros
 también tuvo una nutrida carrera política. Estudió Derecho en la Universidad Católica del Perú y luego hizo un doctorado en Derecho en la Universidad de Grenoble en Francia.

En 1980 fue elegido senador de la República por Izquierda Unida y, cinco años después, fue reelegido con 11,808 votos.

De 2001 a 2003 fue integrante de la Comisión de la Verdad y Reconciliación.

En 2007 fue designado miembro de la Comisión Consultiva del Ministerio de Relaciones Exteriores para ver el litigio marítimo con Chile.

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