Con el paso de los años, Gala Montes se ha convertido en una de las jóvenes artistas con mayor proyección en Latinoamérica, no solo por su participación en reconocidas producciones de televisión, sino también por su carrera como cantante, colaborando con artistas como Calibre 50 y Joan Sebastian.
La celeb de México es conocida principalmente por su interpretación de Luzma, la hija del peligroso narcotraficante Aurelio Casillas en “El señor de los cielos”, el cual fue retirado al final de temporada. “De un día para otro, me sacaron y me dijeron que el personaje es muy fuerte y no nos conviene y me sacaron”, comentó.
Sin embargo, no todo ha sido felicidad en la exitosa carrera de la artista de 22 años, pues vivió momentos muy complicados que la llevaron a lesionarse mientras grababa “Diseñando tu amor”, donde tuvo uno de los roles estelares.
LOS PROBLEMAS DE PESO DE GALA MONTES
Durante sus participaciones en distintas producciones, Gala ha lucido una figura delgada, la cual ha presumido en sus redes sociales, donde cuenta con varios millones de seguidores.
“Solo les quiero enseñar mi progreso de un par de días de entrenamiento y buena alimentación”, explicaba en un video.
Lo que pocos sabían es que detrás del progreso que mencionaba, la actriz sufría de una fuerte obsesión con su cuerpo, llegando a pasar periodos largos sin comida y sometiéndose a estrictas rutinas para obtener una figura que la hiciese sentir “aceptada”.
Recientemente, la artista mexicana se refirió a estos traumas, pidiendo disculpas a sus seguidores por el contenido que compartió, el cual considera dañino.
“Me quedé con un trauma bien gacho, me lastimé, pasé sobre mí, lastimé a mi metabolismo, recuperé el peso que tenía y más y todo por querer sentirme aceptada y ‘amada’ cuando la aceptación no viene de ahí”, inició la joven actriz.
Del mismo modo, Gala siguió el camino de otras actrices que también han criticado los estereotipos y estándares de belleza.
“Vivimos en una sociedad que aplaude que pierdas peso sin importar el trastorno alimenticio que desarrolles en el camino. Lo único que podía hacer en esos momentos era pensar en comida todo el maldito tiempo. Le preguntaba a la gente qué había comido porque fantaseaba con comer azúcar, carbohidratos... Después de varias semanas mi cuerpo no lo logró”, reveló.
La obsesión por controlar su peso le jugó en contra a la actriz, que llegó a sentirse golpeada emocionalmente por lo sucedido.
“Me sentía de malas, sin ánimos de hacer cualquier cosa y el vacío no se iba porque siempre necesitaba más. Nunca era suficiente, me falta esto acá, esto por acá, qué feas piernas, qué fea boca, qué fea cara, necesito hacerme esto… y así todos los días”, admitió.
En estos oscuros momentos, Gala llegó a controlar de manera enfermiza su alimentación, sintiéndose mal cada vez que comía de más.
“Comía una cosita e iba al espejo inmediatamente a verme, a ver si había engordado. Lloraba si al día anterior había pecado comiendo/atracándome culpa de la severa restricción en la que estaba y de verdad que no valió la pena para nada”, explicó.
La obsesión la llevó a tener una fijación muy fuerte por cualquier cosa que consumiera, teniéndole pánico a algunos alimentos y a subir de peso, lo cual “no la dejaba disfrutar de la vida”.
“Afortunadamente ya estoy sanando este tema, pero me da mucho miedo ver este tipo de cosas difundiéndose en redes y más de artistas y personas públicas. Solo les quiero decir que la vida no se trata de hacer cada vez más chiquito tu cuerpo, que como mujeres somos merecedoras de respeto, amor y cosas buenas en la vida, sin importar que talla seamos”, reflexionó.
Si bien Gala se encuentra recuperándose del duro momento que vivió, también reconoció de que es un proceso complicado con “días buenos y malos”, por lo que recomendó a quienes se encuentren un momento similar que busquen ayuda.
“Si estás pasando por algo así, lo único que quiero decirte es que eres más que tu cuerpo. Que eres merecedora de lo que sea que sueñes sin importar cómo luzcas. Y si ves esto desde el otro lado te invito a cambiar tu perspectiva. No es ‘ay qué gorda está, ¿ya viste?’ ¡No! Hay que ver el trasfondo de las cosas, ser empáticos y entender al otro”, aclaró.
Finalmente, la mexicana criticó los estándares de belleza y pidió que estos sean más reales y empáticos con todas las personas para evitar que estos lastimen a más personas.
“Ya me cansé de esto, vamos a cambiar el patrón, hagamos las cosas distintas y no vivamos anestesiados ansiando todas las cosas que podríamos hacer cuando logremos nuestra ‘fantasía’ de ser flacas, subirnos a un unicornio, volar en las nubes y que un príncipe nos salve”, sentenció.