Desde que los talibanes tomaron Afganistán, las menciones a la capital de Qatar, Doha, no han parado de aumentar. La ciudad catarí no solo fue durante años escenario de las negociaciones entre los fundamentalistas y el gobierno afgano recientemente caído, sino que en el 2013 se convirtió en el lugar elegido por los islamistas para abrir la oficina política del movimiento talibán.
MIRA: El peruano que trabajó en Kabul y conoció al presidente que acaba de huir de Afganistán
El diario “The Washington Post” describe a Qatar como un mediador de larga data entre Occidente y los talibanes y, más recientemente, “el único gobierno que se considera capaz de persuadir a los militantes afganos para que sigan comprometidos con el mundo”.
De hecho, en una conferencia de prensa realizada este jueves 2 en Doha, el ministro de Relaciones Exteriores de Qatar dijo que el estado del Golfo estaba dialogando con los talibanes y Turquía sobre un posible apoyo técnico para reiniciar las operaciones en el aeropuerto de Kabul.
En las últimas semanas, Qatar jugó un papel fundamental para ayudar a Estados Unidos y otros países a evacuar a miles de sus ciudadanos y aliados tras el triunfo de los talibanes. Incluso una comitiva diplomática estadounidense que tuvo que salir de Kabul eligió Doha para establecerse por el momento.
El propio presidente de Estados Unidos, Joe Biden, agradeció al emir de Qatar, Tamim bin Hamad Al Thani, por el apoyo de su país a las evacuaciones de Afganistán.
Pero de la mano de la mayor presencia catarí surgen también los cuestionamientos a la conexión cercana que el pequeño estado del Golfo tiene con los fundamentalistas que tomaron el poder a mediados de agosto en Afganistán.
Una de las pruebas más claras de la estrecha relación entre Doha y los talibanes es, probablemente, el hecho de que el mulá Abdul Ghani Baradar, que en los últimos años se convirtió en el principal negociador político talibán, vive en Qatar. Y no solo eso: Suhail Shaheen, el principal vocero internacional del grupo islamista, se comunica con el mundo desde Doha.
LAS RAZONES Y LOS RIESGOS
Qatar es un país muy pequeño geográficamente (11.571 km²) y tiene muy poca población. De hecho, apenas un 20% de los 2,8 millones de habitantes son nativos cataríes, el resto son trabajadores extranjeros. Pese a su extensión, se trata de un país sumamente rico.
“Tiene petróleo y sobre todo tiene uno de los yacimientos de gas más grandes del planeta”, dice a El Comercio Roberto Heimovits, profesor de Relaciones Internacionales de la Universidad del Pacífico.
El analista internacional señala que otra de las características fundamentales de Qatar es que está situado en el Golfo Pérsico, un lugar muy peligroso, donde hay conflictos y permanentes amenazas de conflictos. “Un país de esas características lo que generalmente hace es tratar de llevarse bien con varios actores y vecinos de diferente tipo para no tener problemas con nadie y para que, en caso de tenerlos, pueda contar con otros que lo defiendan”, apunta.
Pero Qatar no trata de llevarse bien con los fundamentalistas solo porque son un actor importante en la zona. Heimovits explica que la familia gobernante de Qatar tiene un interés o una afinidad especial por los fundamentalistas, no solo por los talibanes.
“Uno de los clérigos más famosos del fundamentalismo musulmán, que incluso se dice que inspiró a Osama Bin Laden, ha estado muchos años en Qatar, donde daba sermones sumamente extremistas. Qatar ha demostrado una simpatía bastante grande por el fundamentalismo, a tal extremo que ese fue uno de los motivos por los que en el 2017 tuvo una pelea muy fuerte con Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Egipto y Bahréin, países que estaban molestos por el apoyo de Doha al fundamentalismo, entre otras cosas. Rompieron relaciones e incluso le impusieron un bloqueo económico. Es decir, la simpatía de la élite gobernante de Qatar por los fundamentalistas talibanes no es algo aislado”, dice el experto.
Efectivamente, en el 2017 Emiratos Árabes Unidos, Bahréin, Egipto y Arabia Saudita, el único país con el que la península tiene frontera terrestre, rompieron relaciones con su vecino adinerado al que acusaron de financiar movimientos terroristas.
El analista agrega que los motivos de esta conexión tienen su origen en parte por afinidad religiosa, y en parte porque Qatar cree que eso les da mayor seguridad geopolítica. Apunta que si bien esta buena relación es de ayuda para los talibanes, pues les da oxígeno y ayuda financiera y técnica para eventos como la apertura del aeropuerto de Kabul, puede convertirse en un pasivo para Qatar. “Si los talibanes comienzan a violar derechos humanos en masa, como lo hicieron entre 1996 y el 2001, cuando fueron gobierno en Afganistán, eso podría perjudicar a Qatar”, agrega.
Heimovits explica que Qatar trata de seguir una política que en relaciones internacionales se llama de reaseguro, que significa tratar de estar bien con todos a la vez. “Qatar incluso trata de tener buenas relaciones con Irán, a pesar de que Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos y Bahréin tienen una profunda rivalidad con Irán, y pasa lo mismo con Turquía. Es parte de su política general de querer estar bien con todo el mundo, cosa que no siempre da buenos resultados”.
Por el momento, las autoridades de Qatar han instado a los talibanes a formar un gobierno inclusivo, apoyándose en otras partes afganas, al tiempo que llaman a los gobiernos extranjeros a estar dispuestos a cooperar con los nuevos gobernantes de Afganistán.
Los talibanes han tratado de presentar una postura más moderada al mundo desde que derrocaron al gobierno de Ashraf Ghani, prometiendo proteger los derechos humanos y abstenerse de represalias contra viejos enemigos. Sin embargo, Estados Unidos, la Unión Europea y otros países han puesto en duda esas garantías.
__________________
TE PUEDE INTERESAR
- Huracán Grace: las imágenes de la destrucción en Veracruz que deja el paso del poderoso ciclón
- Bolivia: Expresidenta Jeanine Añez intenta suicidarse en prisión pero es atendida por médicos
- Las guerras fallidas de Estados Unidos: una historia que se repite desde la Segunda Guerra Mundial
- Afganistán: Estados Unidos cambia plan de evacuación en Kabul por amenazas de ISIS
- El “cementerio de imperios”: cómo los ejércitos más poderosos del mundo fueron derrotados en Afganistán en los últimos 180 años
- Una mujer afgana evacuada de Kabul da a luz en un avión de la fuerza aérea de Estados Unidos