Durante los años que estuvo prófugo, Osama Bin Laden no solo exhortó a sus seguidores a atacar a Estados Unidos, también se dio tiempo para escribir cartas a una de sus esposas que estaba en prisión y a sus hijos, según documentos difundidos hoy por el país norteamericano.
Los documentos fueron incautados en el complejo del líder de Al Qaeda en la casa donde fue abatido en el 2011, durante la incursión un comando de Estados Unidos.
El jefe terrorista redactó una carta en forma de testamento a la que tituló "Mi última voluntad", y se la envió a su "fiel y querida esposa".
"¿Cómo estás?", comenzaba la misiva, donde inquiría también por su hijo Osama y sus dos hijas, Asma y Duha; su hermana, Iman y el resto de sus parientes, por cuya salud "rezaba", de acuerdo con el diario español "El Mundo".
"Pido a Dios que estén en buenas condiciones y que su liberación se acelere junto con la de todos los prisioneros muyahidin. Pido que los lleven a todos a las orillas de la seguridad", escribió.
Le aclaraba que no se casaría de nuevo "porque no encontraré una mujer como tú, y permaneceré en la tierra de la yihad hasta que Dios nos una y pueda verte a ti y a mis hijos". Al parecer, buscaba un modo de compensar a la amante fiel "por todo el amor que perdiste", como decía la carta, durante el cautiverio de ella.
Osama llamaba a su mujer "la niña de mis ojos" y "lo más precioso que tengo en este mundo". Aprobaba que ella contrajera matrimonio tras su muerte, pero se reservaba los derechos de casado cuando ambos fueran al paraíso. "La mujer que se casa con dos hombres tiene que elegir a uno de ellos el Día del Juicio".
El testamento en sí advertía: “Si me matan y tú quieres regresar a tu familia, está bien, pero tendrás que criar a mis hijos apropiadamente, y tener cuidado con las malas compañías para ellos, sobre todo tras la pubertad, sobre todo con las chicas”. Bin Laden quería que sus hijas se casaran con un yihadista porque unirse a la yihad era un deber que se tenía que cumplir, según el escrito.
Estaba preocupado además porque el cautiverio de la mujer provocaría a su familia "una crisis psicológica".
También se ponía romántico: "Quiero que sepas que llenas mi corazón de amor y hermosos recuerdos como los de tu capacidad de aguantar tensiones para tranquilizarme, o tu amabilidad hacia mí. Cada vez que pienso en tí, se me llenan los ojos de lágrimas por tenerte lejos".
En otra carta, se burla de la "guerra al terrorismo" del presidente George W. Bush, diciendo que no había logrado estabilidad en Iraq ni Afganistán y se pregunta por qué los soldados norteamericanos "buscan el fantasma", en referencia a las armas de destrucción masiva en Iraq.
Además, hay redacciones donde Bin Laden insta a uno de sus subordinados a informar a "nuestros hermanos" que deben concentrarse en combatir a los estadounidenses. Su "tarea es desarraigar el árbol dañino concentrándose en su tronco estadounidense, y evitar que sea ocupado por las fuerzas de seguridad locales", escribió.
Funcionarios estadounidenses dijeron, en momentos de su muerte, que Bin Laden había quedado tan aislado que ya no ejercía el mismo nivel de control sobre las operaciones de Al Qaeda como en el pasado.
Fuente: Agencias