Londres. El jefe de los servicios de inteligencia de Ruanda, Emmanuel Karenzi Karake, fue detenido en Londres a petición de España por la muerte de varios españoles en su país, informaron este martes las autoridades británicas.
La detención causó indignación en el país africano, que culpó de ella a la arrogancia europea y a una maniobra de quienes niegan el genocidio de 1994.
Karake no pertenecía al gobierno hutu acusado del genocidio de tutsis, sino al movimiento rebelde que lo derrocó, pero a este se le atribuyen también abusos contra civiles.
La justicia española inició ya los trámites para solicitar a Londres la entrega de Karake, dijo una fuente judicial a la AFP.
Horas antes, las autoridades británicas anunciaban la detención de este general de 54 años, uno de los dirigentes más influyentes de su país.
"Fuimos informados por la policía londinense el 20 de junio de que habían detenido al general Emmanuel Karenzi Karake, jefe de los servicios de inteligencia y de seguridad de Ruanda, en virtud de una orden de detención europea emitida por las autoridades en España", declaró un portavoz del Foreign Office, el ministerio de Exteriores británico.
"Karake fue detenido por agentes de la unidad de extradición de la policía londinense en el aeropuerto de Heathrow hacia las 9:45 a.m. del sábado 20 de junio", anunció un portavoz de Scotland Yard.
Aunque este portavoz dijo que las autoridades españolas lo quieren "por su conexión con crímenes de guerra contra civiles", al parecer los cargos se limitarían a actos de terrorismo vinculados a la muerte de españoles.
En el momento en que se emitió el auto de procesamiento contra Karake, en 2008, España tenía jurisdicción universal que le permitía juzgar a responsables de crímenes contra la humanidad allí donde estuvieran.
La jurisdicción universal fue limitada por el actual gobierno y, según dijo una fuente judicial española a la AFP, Karake es ahora buscado solamente "por lo que le ocurrió a varias víctimas españolas".
El general ruandés, de 54 años, compareció ante un tribunal de Londres el sábado por la tarde y volverá a ser presentado ante el juez el jueves.
El arresto llega siete años después de que la Audiencia Nacional, la principal instancia penal española, lanzara un proceso judicial contra 40 militares ruandeses acusados de genocidio y crímenes de guerra.
El Foreign Office no quiso comentar el arresto pero indicó que existe una "relación profunda y antigua" entre el Reino Unido y Ruanda.
Fuente: AFP