Manifestantes antiestadounidenses al grito de "Yanke, vete a casa” agredieron a tres marineros de la Armada de Estados Unidos el miércoles en Estambul, cerca de donde su buque de guerra estaba atracado en una entrada del estrecho del Bósforo en el Mar Negro.
Los manifestantes, que portaban pancartas de la Asociación de la Juventud de Turquía (de tendencia izquierdista), llamaron asesinos a los militares, les lanzaron pintura roja y les pusieron sacos blancos en las cabezas.
"Es obvio por qué han anclado aquí, por sus ambiciones en el Mediterráneo y el Mar Negro. El imperialismo estadounidense es la razón por la que Medio Oriente se ha convertido en una cámara de fuego", dijo el portavoz de la asociación Melik Dibek, en referencia al barrio donde ocurrió el incidente.
Los militares son parte del USS Ross, un destructor de misiles guiados atracado cerca, informó el capitán Greg Hicks, portavoz del Comando Europeo de Estados Unidos. Agregó que los soldados no resultaron heridos, pero su permiso de tierra fue cancelado para el resto del día.
La Embajada de Estados Unidos en Ankara condenó a través de Twitter el ataque y dijo que no tenía ninguna duda de que la mayoría de los turcos rechazarían tal acción .
El sentimiento antiestadounidense en Turquía no está muy extendido, pero algunos turcos acusan a Estados Unidos de inmiscuirse en los asuntos regionales .
DESDE WASHINGTON
El portavoz del Pentágono, coronel Steve Warren, calificó el ataque como "perturbador”. Acusó a los atacantes de ser "matones callejeros, que han desacreditado a los turcos y la reputación de un país muy hospitalario".
Agregó que "parece ser un incidente aislado" y que no cree que vaya a interferir con las relaciones entre Estados Unidos y Turquía.