Una expedición ha descubierto un escondite que contenía cámaras fotográficas y equipos de escalada dejados en 1937 por los famosos alpinistas estadounidenses, Bradford Washburn y Robert Bates, tras coronar el monte Lucania, entonces el pico no escalado más alto de Norteamérica, situado en territorio del Yukón, Canadá. La historia es viral en las redes sociales.
Washburn ya había explorado las montañas del Yukón unos años antes: fue el primero en tomar fotografías aéreas de la región y cartografió la mayoría de sus lagos y nevados. En 1937, acompañado de Bates, llegó hasta la cima del Lucania, de 5.226 metros de altura y ubicado en las remotas montañas de San Elías, entre el estado de Alaska (Estados Unidos) y el territorio del Yukón.
Durante su accidentado descenso debido al mal tiempo, Washburn y Bates se vieron obligados a aligerar sus mochilas y tuvieron que dejar varias cámaras fotográficas y equipos de escalada enterrados en la nieve. Tras caminar más de 160 kilómetros en medio del deshielo primaveral, finalmente fueron rescatados por los miembros de una comunidad indígena del Yukón.
85 años después, el esquiador y alpinista Griffin Post organizó una expedición para hallar el escondite dejado por los exploradores. En su búsqueda, que tomó varios meses, contó con la asistencia de la glacióloga Dora Medrzycka, de la Universidad de Ottawa. “Se embarcaron en una misión sin precedentes: encontrar un increíble trozo de historia”, escribió Parks Canada en un post de Facebook.
Una expedición de alto riesgo
El equipo, formado por los creadores de video de deportes extremos Teton Gravity Research, viajó al parque de Kluane, en el territorio del Yukón, con la misión de encontrar el escondite de las cámaras y otros equipos perdidos.
El equipo comenzó la búsqueda en abril del 2022 y recorrió la zona a pie, en esquís y tablas de snowboard. Para orientarse, los investigadores estudiaron cuidadosamente las fotografías que Washburn sacó durante su histórica expedición. Asimismo, los glaciólogos intentaron determinar la ubicación actual del escondite, que cambió con el paso de los años a raíz del movimiento del glaciar. Sin embargo, este primer intento no tuvo éxito.
Durante su segundo viaje, Medzycka propuso una nueva hipótesis sobre el movimiento del glaciar y recalculó unas nuevas coordenadas, lo que permitió localizar finalmente el escondite, que se hallaba a unos 22 kilómetros de su lugar original. En su interior encontraron una cámara aérea Fairchild F-8 de Washburn y dos cámaras cinematográficas con la película aún cargada, así como equipos de alpinismo, detallaron en un comunicado.
Además del éxito de encontrar el equipo, Post dijo que el viaje también le dio a la comunidad científica una cantidad significativa de datos sobre cómo se ha desarrollado el glaciar. “Tienen toda esta información sobre cómo se ha comportado este glaciar en los últimos 85 años, lo cual es una contribución muy buena a la ciencia”, dijo.
Ahora, un grupo de conservadores de Parks Canada está trabajando para preservar los artefactos.
Contenido sugerido
Contenido GEC