Redacción EC

Washington [AFP]. Trabajadores de Instacart, especializada en la entrega a domicilio de alimentos por internet, y de la gigante Amazon protestaron este lunes en en reclamo de mayores medidas de seguridad e higiene, en un sector exigido por la crisis del nuevo .

Las acciones de los trabajadores se producen ante la creciente preocupación sobre los riesgos de salud que enfrentan los repartidores de comida y otros suministros mientras la gran mayoría de los estadounidenses son instados a confinarse en sus casas.

Entre 50 y 60 empleados se unieron al paro frente a un almacén en Staten Island, Nueva York, para exigir el cierre y limpieza de la instalación luego de que un trabajador diera positivo al coronavirus.

“Hay casos positivos trabajando en estos edificios que infectan a miles”, escribió el trabajador del almacén Christian Smalls en Twitter.

Consultada por la AFP, Amazon dijo que las declaraciones de Smalls eran “engañosas” y que se suponía que estaba en cuarentena.

“Al igual que todas las empresas que luchan contra la pandemia de coronavirus, estamos trabajando arduamente para mantener a los empleados seguros mientras sirven a las comunidades y a los más vulnerables”, dijo Amazon en un comunicado. “Hemos tomado medidas extremas para mantener a las personas seguras”.

Tras la protesta, Smalls fue despedido, confirmó Amazon a la AFP. La decisión obedeció a que no cumplió con el pedido de mantenerse en cuarentena voluntaria tras haber estado en contacto con otro empleado que dio positivo al Covid-19.

Puso a “los equipos en riesgo. Esto es inaceptable”, dijo Amazon en el comunicado.

La fiscal general del estado de Nueva York, Letitia James, calificó de “vergozoso”, “inmoral” e “inhumano” al despido de Smalls y señaló que la ley protege el derecho de protesta de los empleados.

Mientras los empleados de Amazon realizaron la protesta, los trabajadores de Instacart iniciaron una huelga este lunes promovida por un grupo denominado Gig Workers Collective, que agrupa a trabajadores independientes (con contratos a corto plazo y sin beneficios) de distintas apps dentro de la “economía gig”.

“Los trabajadores no completarán más órdenes hasta que se cumplan todas nuestras demandas”, dijo un portavoz a AFP. “Esto no se trata solo de nosotros, queremos también proteger a nuestros clientes”.

Instacart, con sede en San Francisco, dijo que entregaría nuevos implementos sanitarios a sus “compradores” a tiempo completo y establecería un mínimo para las propinas.

Un grupo de trabajadores de la cadena de supermercados Whole Foods, propiedad de Amazon, convocaron a un paro de un día el martes para exigir el pago de salarios a los trabajadores por los días que deban cumplir cuarentena.