Michael Flynn, el general retirado que hizo campaña al lado de Donald Trump y luego se desempeñó como su primer asesor de seguridad nacional, se declaró culpable el viernes de mentirle al FBI acerca de haber contactado a los rusos en nombre de Trump, y dijo que miembros del círculo cercano del presidente estuvieron involucrados muy de cerca con sus contactos.
En los papeles de la corte no se nombra a esos funcionarios, pero The Associated Press ha confirmado que eran Jared Kushner, yerno de Trump y asesor de la Casa Blanca, y la ex subasesora de Seguridad Nacional KT McFarland, que ahora busca ser designada embajadora.
La declaración de culpabilidad de Flynn podría ser un hecho crucial en la investigación penal sobre la posible coordinación entre la campaña de Trump y Rusia para influir en los comicios presidenciales estadounidenses de 2016 en favor de Trump, porque ello significa que ahora a Flynn se le requiere que coopere con los investigadores federales.
El hecho de que se haya declarado culpable de un solo cargo grave de hacer declaraciones falsas lo convierte en el primer funcionario de la Casa Blanca de Trump en reconocer su culpa hasta ahora en la pesquisa que realiza el fiscal especial Robert Mueller.
Lo ocurrido el viernes no da respuesta a las dudas sobre la posible coordinación entre Trump y Rusia en la campaña, pero sí muestra que Flynn le mintió al FBI acerca de las múltiples conversaciones que sostuvo en diciembre del año pasado con el embajador ruso ante Estados Unidos. Los documentos de la corte dejan claro que altos funcionarios del equipo de transición de Trump, incluidos Kushner y McFarland, estaban totalmente al tanto de los contactos de Flynn con los rusos en las semanas previas a que Trump asumiera su nuevo puesto.
Dos ex funcionarios de la transición, que hablaron a condición de guardar el anonimato porque carecían de autorización para declarar sobre el asunto, confirmaron la participación de McFarland. Uno de los funcionarios confirmó que Kushner estuvo involucrado.
Estas revelaciones acercan la investigación sobre el caso de Rusia a la Casa Blanca, y generan interrogantes acerca de la precisión de las repetidas afirmaciones del gobierno de que Flynn había engañado al vicepresidente Mike Pence y a otros funcionarios en torno al contenido de sus llamadas con el embajador Serguei Kislyak.
Kushner había encabezado un esfuerzo del equipo de transición para echar por tierra una votación en las Naciones Unidas a la que se hace referencia en los papeles del tribunal, según ex funcionarios estadounidenses y diplomáticos extranjeros.
El abogado de la Casa Blanca, Ty Cobb, buscó distanciar a Trump de la declaración de culpabilidad de Flynn, y afirmó que “nada en la declaración de culpabilidad ni en el cargo implica a nadie más que al señor Flynn”.
Flynn se mantuvo de pie y en silencio durante su audiencia, excepto para responder breves preguntas del juez. Aceptó la responsabilidad de sus acciones en un comunicado escrito, aunque dijo que también había sido objeto de acusaciones falsas. “Mi declaración de culpabilidad y acuerdo para cooperar con la oficina del fiscal especial reflejan una decisión que tomé para conveniencia de mi familia y de nuestro país”, afirmó.
Trump ignoró las preguntas que le gritaron los reporteros el viernes en torno a este tema.
El equipo de Mueller anunció el mes pasado que presentaría cargos contra tres funcionarios de la campaña de Trump: el jefe de campaña Paul Manafort, el socio de éste Rick Gates, y el asesor de política exterior George Papadopoulos.
Fuente: AP