La Fiscalía de Catania, que investiga el naufragio del pesquero con cerca de 850 inmigrantes muertos en el Mediterráneo el pasado domingo, añadió el delito de secuestro a las acusaciones ya formuladas al capitán del barco, el tunecino Mohammed Alì Malek, por haber encerrado a cientos de ellos en la bodega.
En un comunicado, la Fiscalía comunicó que ha solicitado al juez instructor la confirmación de la detención de las dos personas, Malek y el sirio Mahmud Bikhit, identificados entre los 28 supervivientes como los traficantes que les estaban llevando a las costas italianas.
Mahmud Bikhit y Mohammed Ali Malek son investigados por la muerte de 850 inmigrantes en el Mediterráneo. (AP)
El juez instructor tiene 48 horas para realizar el interrogatorio a los detenidos y decidir si confirma la detención, añade el comunicado.
Los fiscales de Catania explicaron tras haber tomado declaración de algunos sobrevivientes que se confirma la reconstrucción de los hechos, es decir que la embarcación impactó con el mercante portugués King Jacob, ya que nadie la dirigía, y que después se volcó.
Los sobrevivientes han declarado que todos los que se encontraban en la cubierta inferior y en la bodega fueron encerrados con llave, por lo que nunca pudieron salir cuando la embarcación se hundió.
Por ello, Malek, considerado el patrón de la embarcación, ha sido también acusado de secuestro de personas con el agravante de la presencia de menores.
Este delito se suma al de homicidio culposo múltiple, naufragio e instigación a la inmigración clandestina, por los que ambos habían sido ya acusados.
Los dos detenidos serán interrogados por los fiscales esta tarde, agregó el comunicado.
Fuente: EFE