Tras un mes de los atentados terroristas en París que dejaron 130 muertos, Laura Ouandjli, una mujer de 24 años, acudió a una comisaría de esa ciudad y dijo a los oficiales que había sido herida por los terroristas cuando se encontraba en un local nocturno. Pero todo era mentira. Con ello buscaba obtener una indemnización.
La madre de familia desempleada dijo que se encontraba en el bar Le Carillon la noche del 13 noviembre cuando los yihadistas del Estado Islámico aterrorizaron París. Según información oficial, en ese local y en otro ubicado a pocos metros, Le Petit Cambodge, ambos del distrito 10 de la capital francesa, fueron asesinadas al menos 15 personas.
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Ouandjli se presentó con una fotografía de la supuesta "grave lesión" que tenía en el brazo, una venda que cubría sus heridas y un certificado médico, el cual consignaba injertos de piel.
Tras recibir la denuncia, la policía investigó el caso y halló contradicciones en su declaraciones, pues la mujer dijo en un primer momento que resultó herida por una explosión, pero en realidad el bar Le Carillon fue atacado con fusiles.
Asimismo, descubrieron que el certificado médico que Ouandjli presentó era falso y, además, su nombre no figuraba en ninguna lista de heridos la noche del los atentados.
Así, en febrero de 2016, la madre de familia fue arrestada por las autoridades y admitió haber mentido para obtener una indemnización.
Laura Ouandjli fue condenada por el Tribunal Correccional de Versalles a un año de cárcel por "falsificación y fraude". También deberá pagar un euro por daños y perjuicios al Fondo de Indemnización de Víctimas del Terrorismo, según la sentencia.
Fuente: Agencias