Nahir Galarza, la joven de 20 años que fue condenada a prisión perpetua por la justicia de Argentina por el asesinato de su novio Fernando Pastorizzo, rehízo su vida sentimental en la prisión y está enamorada, según el diario "UNO" de Entre Ríos.
De acuerdo con ese diario, el novio de Nahir Galarza se llama Matías Caudana, quien está en la cárcel por integrar una banda de narcotraficantes liderada por su padre, Elbio Gonzalo Caudana.
Matías Caudana y Nahir Galarza se conocieron cuando este fue autorizado a visitar en la cárcel de mujeres de Paraná, donde está la chica, a su abuela paterna, quien se encuentra purgando condena por vender drogas.
"En sus pases del penal de varones (UPI) a la UPVI (de mujeres), conoció a Nahir. Matías tenía el permiso por acercamiento familiar con esta señora que es la madre de Elbio Caudana", explicó Augusto Lafferriere, abogado de Caudana.
El abogado presentó al Tribunal Oral Federal de Paraná una solicitud para que su defendido pueda verse con Nahir Galarza “para profundizar la relación de noviazgo”.
"No sé bien en qué circunstancias se conocieron Matías y Nahir, pero es seguro que se cruzaron en la cárcel de mujeres y es donde entablaron la amistad, y luego este inicio de la relación que ahora se busca reforzar", añadió Lafferriere.
Nahir Galarza asesinó de dos balazos a su novio Fernando Pastorizzo (20) el 29 de diciembre del 2017. A inicios de julio de este año fue sentenciada a prisión perpetua por un tribunal de la ciudad argentina de Gualeguaychú. El crimen lo perpetró con la pistola de su padre policía. El caso tuvo gran impacto mediático en el país austral.
El juzgado consideró por unanimidad a Nahir Galarza "autora penalmente responsable del delito de homicidio calificado por ser una persona con la que mantenía una relación de pareja" desde hace cuatro años, pese a que ella había alegado que su vínculo era "ocasional".
En la lectura de la sentencia, el tribunal consideró acreditado que el pasado 29 de diciembre la acusada utilizó un arma de fuego reglamentaria para "menoscabar" la vida de Pastorizzo.
Nahir Galarza primero le disparó por la espalda "a quemarropa" mientras viajaban en una moto y, después, cuando el joven ya estaba "mortalmente herido" en el suelo, volvió a disparar contra él.
"Ambos disparos en modo alguno fueron accidentales o involuntarios", sino "intencionados", por lo que, para el tribunal, queda "destruida" la hipótesis de la defensa, que sostuvo que los disparos se produjeron accidentalmente.
Asimismo, la sentencia considera que no pudo acreditarse que Galarza hubiera sido víctima de violencia de género, como alegaba su defensa, por lo que "no se advierte elemento alguno que pretenda inferir que la pena no guarde proporcionalidad", señaló en aquella ocasión el tribunal.
Tras pasar gran parte de su detención en la Comisaría del Menor y la Mujer de Gualeguaychú, actualmente Nahir Galarza cumple su condena en el Penal de Mujeres de Paraná.
En noviembre pasado, Galarza fue noticia por enfrentarse con otra interna. Según trascendió, la joven discutió con una ex funcionaria municipal condenada por narcotráfico. La fuerte pelea incluyó amenazas de muerte cruzadas.