Montevideo ("El País" de Uruguay/ GDA)
"Gracias por entender. Que tengan un lindo recuerdo", culminó la sonriente funcionaria mientras los novios asentían. Vino entonces el arroz que barrieron luego dos funcionarias para dejar todo pronto para el siguiente enlace, el último de la tarde que terminó sobre las 16.30 en Montevideo, Uruguay.
A esa hora una limpiadora y otro funcionario entraron la mesa que se había utilizado para los enlaces y cerraron las puertas del Registro Civil. Las novias no parecían contrariadas por casarse en la vereda y una dijo que el trato de los funcionarios registrales fue "excelente".
Así terminaba una agitada jornada de trabajo callejero para los registrales. Se realizaron 12 enlaces en la mañana y 17 en la tarde. Y hoy viernes, día en el que habitualmente hay muchos casamientos, hay previstos 19 para la mañana y una cantidad superior en la tarde, dijo a El País el sindicalista Eduardo Murías. Aseguró que los contrayentes vieron la medida como "simpática" y entendieron que "no es contra la población".
El miércoles había renunciado el director del Servicio Civil, Adolfo Orellano, cuyo alejamiento pedía el sindicato que lo acusaba de "no mover un dedo" para evitar el conflicto, según dijo Murías. El sindicato había denunciado al funcionarios por perseguir al gremio. Todavía no se conoce quién lo sustituirá.
A centímetros de donde se ubicaban los contrayentes un pegotín en la ventana del edificio del Registro Civil decía: "Increíble, desde el año 2011 nos meten la mano en el bolsillo. Ahora nos toca hablar a nosotros, perdimos la paciencia".
Otro cartel mostraba una caricatura del presidente José Mujica que decía: "Les meto una excusa, les encajo una puteada". Y abajo se leía: "No se anotan parejas. No se fijan fechas de matrimonio".
Los registrales reclaman desde 2011 un aumento de 26% al que, sostienen, el gobierno había accedido.
La Confederación de Funcionarios del Estado (COFE) medió con el Poder Ejecutivo y el lunes por la mañana se realizará una negociación en el Ministerio de Trabajo para procurar resolver la situación.
Por su lado, la Asociación de Escribanos del Uruguay, emitió un comunicado en el que muestra su preocupación por los paros de los funcionarios registrales.