Jerusalén, EFE
Las milicias palestinas dispararon hoy más de 130 cohetes contra objetivos en todo el territorio israelí, 22 de los cuales fueron interceptados por el sistema defensivo Cúpula de Hierro, informó esta noche el Ejército en un comunicado.
Un centenar de los proyectiles disparados alcanzaron el territorio israelí, la inmensa mayoría en zonas deshabitadas, y una decena hizo impacto en zonas pobladas, causando varios heridos.
Uno de ellos es un joven de 16 años que sufrió heridas graves por no encontrar refugio cuando sonaron las alarmas en la ciudad de Ashkelón.
En la jornada de hoy, los grupos armados palestinos dispararon por primera vez un cohete de largo alcance contra la ciudad israelí de Haifa, a 150 kilómetros de distancia de la franja.
El cohete formaba parte de una andanada de tres proyectiles disparados a media tarde, los dos restantes contra la zona metropolitana de Tel Aviv y que fueron interceptados por el sistema de defensa Cúpula de Hierro.
En los seis días de enfrentamientos armados, que se han cobrado por ahora las vidas de al menos 167 palestinos en los intensos bombardeos aéreos sobre la franja, las milicias habían conseguido alcanzar la ciudad de Hedera, a 100 kilómetros, y el perímetro de Jerusalén, a unos 70.
Después de una jornada de relativa calma en Israel, las milicias comenzaron a disparar decenas de cohetes al caer la noche, activando las alarmas antiaéreas en más de una veintena de localidades en un radio de 70 kilómetros alrededor de la franja, incluida nuevamente Jerusalén.
Según el último parte militar, en los últimos seis días los palestinos han lanzado unos 940 cohetes.
En ese mismo período, la Fuerza Aérea israelí ha atacado más de un millar de blancos en la franja con más de 1.400 toneladas de explosivo.
La ofensiva israelí se centra en las últimas horas en el norte del enclave mediterráneo, donde miles de habitantes han tenido que abandonar sus casas por un ultimátum que les había dado el Ejército horas antes.
Según el Ministerio de Salud en Gaza, el 70% de los muertos y heridos son civiles, porcentaje que el Ejército israelí ha rechazado.