Un niño de 13 años falleció luego de que una cabra que iba a ser sacrificada para la festividad de Eid al Adha saltara del techo de un edificio de seis pisos y lo aplastara. Incidente ocurrió el 3 de octubre en Turquía.
La víctima, que fue identificada como Heval Yildirim, estaba jugando con sus amigos cuando ocurrió el accidente. No se reportaron otros heridos por la tragedia.
El animal pertenecía al papá de Heval, Mehmet, quien la había comprado para ofrendarla durante el Eid al Adha o Celebración del Sacrificio, una fiesta religiosa donde los musulmanes de todo el mundo celebran la voluntad de Abraham de sacrificar a su hijo Isaac bajo órdenes de su deidad.
Según la tradición, el animal sacrificado es separado en tres partes: uno para la familia que lo ofrece, otro para sus amigos y una última para los necesitados.
Debido a la falta de espacio en el departamento, la cabra había sido colocada en el techo de la construcción, cuyo borde solo era resguardado por una pequeña cerca, informó The Mirror.
Luego del accidente el menor fue llevado al hospital, donde los médicos lo declararon muerto. El incidente es investigado por las autoridades, quienes resaltaron que el caso no tiene precedentes.
El acongojado padre también se mostró sin palabras ante las desafortunadas circunstancias.
“Estoy devastado pero ¿qué más puedo decir? De hecho, no hay nada que pueda decir. Incluso el fiscal ha dicho que este incidente puede ser el primero de su tipo en el mundo”, afirmó.