Camino al andar con El Comercio, por Jorge Ruiz de Somocurcio

Hace 30 años cerró ese estupendo suplemento dominical que era “El Caballo Rojo”, dirigido por Antonio Cisneros. Yo publicaba ahí eventualmente unas crónicas urbanas. Después del cierre, el arquitecto Luis ‘Cartucho’ Miró Quesada, ex decano de la Facultad de Arquitectura de la UNI y profesor mío, tuvo a bien invitarme a enviar algunos textos sobre la ciudad de Lima a El Comercio.

Empezó así una relación que dura hasta ahora y me convirtió en testigo de excepción de campañas libradas contra viento y marea: el enfrentamiento a Sendero Luminoso que hacía inviable Lima y el apoyo al patronato de Eduardo Arrarte que en 1992 consiguió la declaratoria del Centro Histórico como Patrimonio Cultural de la Humanidad por parte de Unesco. El apoyo a la victoria del alcalde Alberto Andrade en los 90, que inicia realmente el desmoronamiento de la dictadura de Alberto Fujimori. Su candidato, Jaime Yoshiyama, cuyo lema era “con todo el apoyo” fue derrotado por Andrade.

Y la primera gran tarea fue reinventar el Centro Histórico, abandonado a su suerte. Primero fue la recuperación del espacio público.  Se reubicaron 30 mil ambulantes callejeros en exitosos campos feriales. Luego vino el apoyo a la convocatoria a la inversión privada con la puesta en valor de los balcones coloniales y la peatonalización del centro financiero, proyecto saboteado por el INC, de entonces.

Siguió luego la defensa ambiental de los valles Chillón, Rímac y Lurín; y la difusión del proyecto presentado al Banco Interamericano de Desarrollo para la recuperación del Centro Histórico de Lima, con el soporte mediático a la reconstrucción del Teatro Municipal, incendiado en 1998.

El Comercio hizo suyas en el 2000 las propuestas para dotar a Lima de modernos sistemas metropolitanos. Uno fue el transporte público rápido masivo (Lima Bus), que luego fuera implementado por Castañeda, rebautizándolo como Metropolitano; y otro, el sistema mayorista de alimentos gracias a la recuperación del Mercado de Santa Anita.

Fue clave la cobertura de El Comercio en todo el 2012 del Plan Regional de Desarrollo Concertado, a través de sus audiencias vecinales, y la Costa Verde tuvo el impulso de un nuevo modelo de gestión. Además, la defensa de la memoria de la ciudad prehispánica fue acogida en páginas especiales.

Es imposible entender los caminos de Lima sin los hitos sembrados por El Comercio.

La mano de ‘Cartucho’ Miró Quesada estuvo presente en muchas iniciativas de salvataje de la capital. Fue uno de los pilares del Grupo Espacio, que incorporó el pensamiento de una arquitectura y urbanismo modernos a la cultura del país, con una  visión  que integraba al Perú profundo con el mundo contemporáneo.

Este 14 de mayo se celebran 100 años de su nacimiento. Vaya un homenaje a él desde esta columna y al Diario que me invitó a ser parte de su historia.