Al menos una moción de censura ya viene recorriendo los distintos despachos parlamentarios en busca de las 20 firmas necesarias para debatir la salida de Eduardo Salhuana de la presidencia del Congreso. Para sacarlo del cargo, la representación requiere de una mayoría simple, pero es el hecho de que el procedimiento ocurre en medio de un receso parlamentario, lo que puede salvar al representante de Alianza para el Progreso (APP).
Recolectar 20 firmas no resulta difícil, pese al receso, cuando la mayoría de los legisladores –y sus respectivos despachos– se encuentran vacacionando. A la bancada de Honor y Democracia, impulsora de la moción de censura, le alcanzaría con recolectar firmas de los grupos de izquierda para iniciar el trámite.
El escenario se complica en lo procedimental. Dado que estamos en receso, el pleno –única instancia donde se puede debatir una censura– no sesionará hasta marzo. Para convocar a un pleno extraordinario, se tendría que recolectar más de 70 firmas. Este número es más complicado, por lo que APP buscaría que el tema recién se toque una vez que culminen las vacaciones legislativas, en marzo. Esta maniobra de dilatación jugaría a favor de Salhuana, quien acaba de aplicar esa misma estrategia al irse de viaje a China con el único objetivo de que el tema vaya perdiendo fuerza mediática.
Más allá de lo procedimental, la clave de una eventual censura recae en el respaldo de Podemos Perú, Acción Popular y Renovación Popular. Podemos Perú se ha enfrentado con APP y Somos Perú por los ataques de estos contra su congresista Juan Burgos, presidente de la Comisión de Fiscalización, que investiga la presunta red de prostitución en el Congreso. Además de que Acción Popular no ha recibido respuesta al oficio que envió a Salhuana pidiendo acciones concretas como la salida del oficial mayor.
Para censurar a Salhuana, se requiere una mayoría simple, por lo que depende del quórum de la sesión en la que se debata el tema. A Lady Camones, también de APP, se la censuró con apenas 61 votos, y la aritmética actual nos arroja una proyección de respaldo de 59 votos, si es que se consiguen las adhesiones en bloque de Podemos Perú, Acción Popular y Renovación Popular.
Está claro que Fuerza Popular, Perú Libre y Avanza País no respaldarían la censura por ser miembros de la actual Mesa Directiva. Mientras que Somos Perú actúa como un satélite de APP. El resto de los votos tendría que salir de otros grupos, como el Bloque Magisterial, que resulta una gran incógnita, pues en varias oportunidades ha actuado en línea con el partido de los Acuña (además de que tres de sus integrantes están afiliados a Somos Perú).
En el fondo, este escenario puede definir la nueva correlación de fuerzas legislativas con miras a las elecciones de la Mesa Directiva de julio. Para APP, el escenario es bastante complicado, pues, si bien podrían salvar a Salhuana de una censura, nada podrá salvarlos del recuerdo de haber tenido tres de las peores presidencias del Congreso en los últimos 20 años.