Es un modismo verbal del habla popular peruana que implica lejanía y desconocimiento del domicilio de la persona aludida. El 31 de julio del 2012, el presidente de la República Ollanta Humala incluyó esta frase en un discurso pronunciado en La Libertad: “La gente que vive en la punta del cerro no tiene las mismas oportunidades que tiene la gente de la costa”. En cambio, otro modismo, también muy usado, mandar a la punta del cerro puede tener el matiz negativo de ‘mandar al diablo’.