La tecnología puede ser aplicada de muchas maneras para facilitar la carga de trabajo en una amplia variedad de campos como la ciencia y la ingeniería. Actualmente estamos viviendo un impacto y alto crecimiento en ‘startups’ y nuevas herramientas tecnológicas basadas en inteligencia artificial (IA), por lo que esta nueva tecnología no puede pasarse por alto al momento de buscar oportunidades de aplicación en problemas que afligen constantemente a nuestro país, como la corrupción.
Así, nos preguntamos, por ejemplo, ¿cómo revertir la prevalencia de la corrupción en nuestro país desde la tecnología? Recientemente, en Chile se desarrolló una ‘startup’ para combatir la corrupción en las empresas al procesar las transacciones y analizar patrones anómalos. Con el ‘boom’ de la IA, hemos sido testigos de asistentes virtuales de texto, entre otros. Tal vez no es sabido por muchos, pero el potencial de esta tecnología radica fundamentalmente en el entrenamiento de algoritmos (serie de procesos para lograr un objetivo).
En este sentido, existe la posibilidad de utilizar esta tecnología para entrenarla como lo propone el economista colombiano Kevin Mojica en su investigación “Inteligencia Artificial para Detectar Corrupción en la Administración Pública Municipal de Colombia”, en donde aborda cómo aplicar la IA como alternativa para atacar la corrupción ya que, como menciona el autor, “hasta el momento, en la mayoría de países la focalización de esfuerzos para identificar riesgos de corrupción se da a partir de índices sintéticos construidos a partir de medidas de percepción o capacidad institucional, medidas que, por construcción, pueden no reflejar la corrupción real de los gobiernos”.
La investigación, realizada en el 2021, sugiere el potencial de la IA para predecir eventos de corrupción en los municipios a partir de su entrenamiento con datos reales, teniendo resultados exitosos para detectar patrones de corrupción y emitir alertas tempranas como medidas preventivas. Desde mi punto de vista, al igual que hicieron en Chile, la corrupción puede ser atacada no solo desde el interior de los organismos estatales con la aplicación de esta tecnología, sino también desde fuera del gobierno, con profesionales en ciencias de la computación o análisis de datos, apasionados por la investigación y entusiastas en el desarrollo de empresas para revertir la situación actual. Pero ¿por dónde empezar?
Existen espacios como IncuVa House, Impact Startup Competition y otros similares que serían ideales para empezar a desarrollar este tipo de proyectos. Ahora es el momento para actuar y encontrar un nuevo y efectivo “tratamiento” para el cáncer que padece nuestro país.