La Segunda Fiscalía Provincial Penal de Hualgayoc, en la región Cajamarca, abrió una investigación preliminar por 120 días sobre el caso de agresión contra la joven extranjera Oriana Rosas Pérez (20). La madrugada del sábado 21 de setiembre, un grupo de ronderos, acompañados por personal de serenazgo de la Municipalidad Provincial de Hualgayoc - Bambamarca, fue grabado cuando golpeaban a Rosas en la calle Jorge Chávez.
Ella transitaba por esta vía junto a un grupo de amigos, también de nacionalidad venezolana, al momento del ataque.
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Esta indagación preliminar será por el presunto delito de agresión contra la mujer (Artículo 122-B del Código Penal), que sanciona con mínimo 1 y máximo 3 años de pena privativa de la libertad a quienes resulten responsables.
El Ministerio Público informó que las autoridades ya tomaron la declaración de Rosas Pérez y también pasó por el examen médico legal correspondiente. Precisaron que la joven presentó la denuncia por las agresiones que sufrió, pero no pudo identificarlos.
Como parte de las investigaciones, se han programado las declaraciones de miembros de serenazgo a partir del 22 de octubre. El fiscal Michel Alcántara, de la Segunda fiscalía provincial penal de Hualgayoc, es el encargado de las indagaciones.
Rosas detalló a Cajamarca Reportes que el ataque ocurrió cuando salía de un local nocturno. “Fui al karaoke con unas compañeras. Cuando salgo, a las 3 a.m., no estaba borracha ni peleando en la calle, solo iba a mi cuarto. Se bajó un agente del auto de serenazgo y dijo que me fuera de su país. No solo a mí, éramos tres amigas con tres amigos y mi pareja”, dijo la joven. “Como estaban diciendo eso, le pegaron primero a uno de mis compañeros y a nosotros. A mí me pegaron más”, relató.
Por su parte, el serenazgo de Bambamarca dijo el fin de semana que, antes de estos hechos, ellos fueron agredidos por el grupo de extranjeros. “El serenazgo fue a decirles que se retiraran porque estaban alterando el orden público desde las 3 de la mañana. Ahí fue cuando ellos se resistieron y entonces la ronda campesina les dijo que se retiraran. Como estaban en estado de ebriedad, agarraron piedras y las tiraron al carro de Serenazgo. La ronda interviene y seguramente los agredieron”, dijo un agente que solicitó mantener en reserva su identificación.
Cuestionado sobre la reacción de la ronda y serenazgo, contestó: “Hay violencia. Nosotros tenemos órdenes para no agredir a nadie, pero cuando nos atacan sí podemos defendernos”. "La chica vino en defensa del que agarró las piedras”, agregó.
De acuerdo con información de Migraciones, Oriana Rosas ingresó el 20 de febrero de este año a Perú, por la frontera con Ecuador. Ella presentó su cédula de identidad al momento de entrar al país, por lo que le otorgaron 180 días de permiso como turista.
Jeannette Llaja, abogada especializada en temas de género, explicó que el fiscal encargado no debería quedarse solo con la evidencia del video y el resultado de medicina legal, sino abordar el contexto en que ocurrió la agresión.
“No solo debe basarse en el resultado de medicina legal, sino en todo el contexto. Es decir, que no pase lo que ocurrió con Arlette Contreras, donde la primera vez que Adriano Pozo fue procesado se ciñeron al resultado de medicina legal, que sale lesiones leves, pero luego fue tipificado como tentativa de feminicidio”, dijo Llaja a El Comercio.
Los elementos determinarán si este caso es una agresión contra la mujer e integrantes del grupo familiar, lesiones leves o lesiones graves. “Para que sea agresión contra la mujer debe verse si hubo discriminación hacia ella por ser mujer. ¿Hay prejuicios porque ella es una mujer venezolana? Si hay un móvil de discriminación por ser mujer, el siguiente paso es ver si es agresión contra la mujer, lesiones leves o graves”, agregó la abogada.
Por otro lado, explicó que también se debe analizar si los condicionantes de la agresión fueron estereotipos hacia ella por ser mujer y de nacionalidad venezolana. Agregó que sería relevante que se analice, además, el rol de los miembros de serenazgo. “No basta con que ellos digan ‘no pude’ para ejercer su función. La fiscalía tiene que analizar si estaban impedidos de intervenir".
Finalmente, recordó que en Perú la discriminación es también un delito. “Nosotros no podemos negar que en este momento hay un contexto de discriminación hacia una población venezolana. El delito de discriminación por nacionalidad tiene una pena menor, pero es un agravante”, explicó en base a este caso.
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