Congreso rechazó irregularidades en uso de dinero de caja chica

La presidenta del Congreso de la República, Ana María Solórzano, negó que se hayan producido irregularidades en la administración de los recursos económicos de su institución, así como en la compra de uniformes para su personal, y aseguró que el Parlamento tiene las “cuentas claras”.

En conferencia de prensa acompañada de funcionarios del Congreso, Solórzano aclaró hoy que su gestión no compró ningún uniforme y que el pago hecho a la proveedora de vestuario para el personal se realizó porque el producto ya había sido entregado.

“Cuando ingresamos nos tocaba pagar el uniforme que ya había sido entregado a los trabajadores, nosotros no podíamos dejar de cumplir esa obligación a la contraprestación que ya se había dado porque hubiéramos estado en todo caso incursos en un delito de no haber pagado, que es el delito de enriquecimiento indebido”, precisó.

Según una denuncia periodística, el Congreso compró uniformes a una empresa sancionada y maneja, además, dos cajas chicas, hecho que contravendría el marco legal.

Sobre la primera denuncia, la gerente de logística del Congreso, Tatiana Guevara, detalló que los uniformes en cuestión datan de un proceso convocado el 24 de marzo de 2014, a través de una contratación directa para uniformes de invierno.

La buena pro, indicó, fue otorgada el 2 de abril del 2014, meses anteriores al inicio de funciones de la actual Mesa Directiva. 

Asimismo, Guevara dio cuenta que Industrial Gorak, la empresa proveedora, fue en efecto sancionada el 18 de octubre el 2013, pero una medida cautelar del Décimo Juzgado Constitucional de la Corte Superior de Justicia de Lima ordenó al OSCE, en noviembre del 2013, dejar sin efectos legales la sanción, por lo cual estaba habilitada para contratar con el Estado.

“SOLO HAY UNA CAJA CHICA”
Solórzano afirmó que el Congreso solamente tiene una caja chica, cuyos recursos se emplean para “gastos menudos urgentes”, así como para atender, entre otros, gastos para solucionar un corto circuito, una pastilla de freno, una carta notarial.

De esta manera, la titular del Parlamento rechazó la denuncia que hizo un diario local, en el que señalaba que existían dos cajas chicas en ese poder del Estado.

“Que no quede en la población que el Congreso tiene una caja chica de 80 mil soles, eso no es cierto; tiene hasta 80 mil, monto que siempre ha tenido. Nosotros no hemos venido a inventar la caja chica en esta gestión, siempre ha existido en este Parlamento, pero para gastos justificados y tenemos los mecanismos de control para ver en qué se gasta”, afirmó.

En ese sentido, expresó toda la disposición del Parlamento para aclarar cualquier tipo de inquietud referente a la administración.

“Nosotros estamos con las cuentas claras y dispuestos a sacar la información, acá no se trata de que se filtre o no, todo se puede filtrar o lo podemos publicar en la página de transparencia, porque estamos con toda la voluntad de hacer las cosas de manera correcta”, aseguró.

Por otra parte, en relación al consumo de cucarachas por parte de adolescentes en el programa de TV “El último pasajero” para ganar un viaje de promoción, Solórzano señaló que “este es un tema más de responsabilidad de los padres de familia, porque los concursantes son menores de edad”.

Consideró que los padres deben prohibir a sus hijos, con la responsabilidad que tienen de la patria potestad, de participar en este tipo de programas que denigran a los menores. (Fuente: Andina)

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