Fujimoristas critican que Kenji no se reúna con bancada

Fuerza Popular definió el miércoles por la noche su posición oficial respecto a las denuncias de abusos sexuales contra el Sodalicio de Vida Cristiana. Horas antes, el fujimorismo fue blanco de ácidas críticas debido a que en el Consejo Directivo del Congreso –en el que tiene mayoría– se opuso a que se formara una comisión especial para investigar al movimiento religioso.

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El Comercio supo que la reunión, convocada por Keiko Fujimori, se extendió hasta la madrugada del jueves y participaron los tres voceros de la bancada, Luis Galarreta, Daniel Salaverry y Lourdes Alcorta; así como los presidentes de las comisiones de Fiscalización y Constitución, Héctor Becerril y Miguel Ángel Torres, respectivamente.

“Nos quedamos hasta muy tarde tratando de buscar una solución y esa fue que la Defensoría del Pueblo se aboque al tema de lleno y que la Comisión de Justicia apoye su labor con un grupo que le dé seguimiento”, relató Becerril.

Horas más tarde, en la mañana del jueves, los 72 miembros de la bancada fueron convocados para una nueva reunión en la que se ratificó lo acordado previamente y se convenció a quienes hasta entonces mantenían discrepancias.

Uno de ellos fue el reelecto Federico Pariona, quien el miércoles compartió e incluso celebró el telúrico tuit de Kenji Fujimori en el que calificaba de nauseabundo lo ocurrido en el Consejo Directivo.

“Yo debí haber revisado bien. Primero pensé que lo mejor era que se formara una comisión, pero reflexionando mejor opté por el acuerdo de bancada. Creo que el Congreso no debe tomar protagonismo con el dolor de mucha gente”, contó Pariona a este Diario.

Kenji también estuvo en la cita. Según fuentes de este Diario, algunos de sus colegas de bancada le recomendaron ser más prudente con sus comentarios públicos, pues “hay instancias internas que deben respetarse”.

Una postura similar expuso el parlamentario Miguel Elías Ávalos. “A mí me hubiera gustado que sea el Congreso el que vea la investigación del Sodalicio, pero lo importante es que, de alguna manera o de otra, se investigue”, expresó.

Desde entonces, el congresista Fujimori ha vuelto a su habitual mutismo.

—Kenji, el solitario—
Becerril mostró su malestar cuando se le consultó acerca del rol que el menor de los Fujimori cumple en Fuerza Popular. “Te soy franco, él no va regularmente a las reuniones de bancada, no participa en los plenos, no sé cuál es su agenda. No vemos de su parte compromiso de trabajo en temas que atañen a la bancada”, aseveró.

Daniel Salaverry confirmó a El Comercio que, efectivamente, ha observado “poca participación de Kenji en las reuniones de la bancada”. También lamentó que mensajes poco fraternos se publiquen en las redes sociales antes de una discusión interna.

“En cualquier organización las relaciones personales se rigen en base al respeto mutuo. Es lógico que si alguien falta el respeto a los miembros de su organización, sea merecedor de una sanción. Sin embargo, ese tema [el del tuit de Kenji] no se ha tratado. Esa decisión le corresponde a la dirigencia del partido”, afirmó.

—Asunto zanjado—
Finalmente, fuentes fujimoristas dijeron que Kenji, uno de los ausentes en la celebración por los siete años de Fuerza Popular, no recibiría una sanción, puesto que se pronunció sobre el Sodalicio antes de que el partido tomara una posición.

“Si él o cualquier otro sale ahora a hablar en contra de lo acordado, eso sí ameritaría al menos un llamado de atención inicial”, indicaron.

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