1 / 6 Palta a la pekinesa. El 1 de setiembre, Araoz, lideresa de la iniciativa global Food Forever, estuvo en Pekín promoviendo la biodiversidad nacional, más rica que la variedad política local.
2 / 6 Chinos y Chaglla. El 12 de setiembre, la vicepresidenta recibió en su despacho congresal a representantes de las empresas chinas que han comprado la central de Chaglla a Odebrecht.
3 / 6 Antes de la tormenta. Hace cuatro días, el 23, Aráoz coincidió con el presidente Vizcarra en la ceremonia por el día de las Fuerzas Armadas. No hubo roces, solo sonrisas.
4 / 6 Retablo. El jueves en Ichimay Wari, barrio de artesanos ayacuchanos en Lurín, entre corazones y sincretismo de la fe.
5 / 6 Sobre la ola. Este viernes temprano, Araoz visitó el programa social de niños con habilidades diferentes, que practican el surf.
6 / 6 Trabajo. La vicepresidenta también estuvo este viernes en la feria itinerante de promoción del empleo que organiza el Ministerio de Trabajo. Su agenda es variopinta. Luego fue al Congreso a esperar el mensaje presidencial.
La vicepresidenta y congresista Mercedes Araoz no tiene ultimátums que responder. Se ha puesto al margen del disparadero entre el Congreso y Palacio de Gobierno, aunque tiene oficinas en ambos y el resultado del enfrentamiento de poderes que vivimos pudiera tener un desenlace crucial para ella.
En efecto, si hubiera una súbita sucesión presidencial, Mercedes Araoz Fernández enfrentaría el dilema de ser presidenta o renunciar para apurar la convocatoria de elecciones en manos del presidente del Congreso.
Pero la cuenta de Instagram de ‘mecheaf’ no está para registrar el estrés de los dilemas del poder, sino momentos más armoniosos y felices.