Alicia Rojas Sánchez

El caos ha seguido rodeando al expresidente Pedro Castillo. Si su gobierno adoleció de claras orientaciones y cohesión, hoy conduce un equipo legal donde los quiebres son aún más constantes. El origen sería la pugna por el protagonismo. Lo que ha derivado, por ejemplo, en la reciente salida de Walter Ayala del grupo de abogados defensores del exjefe de Estado.