De la nada, que debe ser donde habita, ha reaparecido el poeta casmeño Dennis Angulo. Siempre oportunista cuando no parasitario, ya anteriormente se ha comparado su poesía con los hábitos alimenticios de buitres y gallinazos: la descomposición inspira su pluma. El resultado no está lejos del gusto de un ave rapaz.
Angulo no podía perderse el clima de zozobra que asola el país en estos días. Es así que está haciendo circular vía Instagram –necedad que quiere hacer pasar por novedosa- su último poemario intitulado #Demuéstrenloimbéciles.
Por obligación profesional que linda en el sacrificio divulgamos tres poemas de este volumen. Empecemos por el más benigno. Apropiándose de una voz ajena, la presidencial, se refiere al adjetivo descalificativo del título, estableciendo una antojadiza relación entre esa voz y un personaje de la farándula recordado por su uso de la invectiva:
IM BE CIL
Imbécil tiene tres sílabas:
La primera es labio y tensión,
Que reverbera, sostenida,
Gozo y anticipación.
La segunda, beso a medias,
una sensual tragicomedia
De una furia contenida
o una urdida maldición
La final es siseo bífido,
silbido corto y magnífico
Que parece que pariera
Al imbécil terrorífico
Fui presidente, fui nación
Pero no nací sabiendo.
No pido más demostración
Que el fino agradecimiento
Mi deuda será infinita
Así queda por escrita
Gratitud brota y eleva
al decirte lo que vales:
Gracias, Pablo Villanueva,
¡ Melcochita, gracias totales ¡
Páginas más adelante arremete contra el vergonzoso incidente protagonizado por el congresista Moisés Mamani a bordo de un avión. Banalizar la agresión de género no es gracioso. Angulo lo hace:
Primera fila, pasillo
Soy Mamani, soy humano
Tenme presente varón
Me excita volar en avión:
Ya me pica la mano
Soy Mamani, represento
Este es mi mejor momento
No canto como Petrozzi
Pero otros dones ostento:
La mano me huele a umami
Y siendo yo Cabanossi
Me vendo como salami
Poco importa, soy buen pobre
Soy feliz con lo que salga
No hago esto por el cobre
Sino por emoción que encabalga
- Descompenso, aliviano-
Espérate que me recobre
Que al cuerpo vuelva mi alma
Si sientes cerca mi mano
Es porque es mía tu nalga
Finalmente, en uno de sus poemas más polémicos, el casmeño aborda el delicado impasse diplomático sucedido a raíz del pedido de asilo del ex presidente García ante la República del Uruguay. Pedimos anticipadas disculpas a la representación diplomática del hermano país. Aclarando que este caso en particular es a la persecución política lo que Angulo es a la poesía:
Su majestad el asilo
Me persiguen, me acorralan
Que difícil situación
“Todo es culpa de Alan”,
¡Vil calumnia, un baldón¡
Se me acusa de desfalco
¡Hagan la prueba del talco!
Aquí no hay ningún ampay
Viene por mí un dictador,
un fiscal, un chicharrón.
No lo permita, Uruguay
(yo entraba hasta con ganzúa)
¡Asílame, pueblo charrúa!
Embajador, tome nota
Quiero ventana y balcón
Baño con tina y cortina
Algo cerca a la cocina
Yo desayuno compota,
(que rima tan hablantina, casi digo argentina)
Dame chancay, Uruguay
Mi tamal y mi chicharrón
ya no salgo ni con grúa
¿Habrá room service, charrúa?
Keiko y Nadine, mi respeto
Las une un valor afín
Pudiendo ser fugitivas
Dijeron yo me someto
Se inmolaron – yo discrepo-
Honor a sus almas cautivas,
! Mártires de la preventiva !
Mi pesar es verdadero
Mi tv es marca Miray
Lo entienden mis escuderos
Estoy aburrido, caray
Como lo dijo un arriero
Lo canto en graves y agudos
(escucha claro, Uruguay:)
Pa cojudos, los bomberos
El poemario felizmente no estará disponible en ninguna librería.