El gobierno español ha dado la autorización para que más de seis millones de niños menores de 14 años puedan pasear por la calle a partir de este 26 de abril.
El gobierno español ha dado la autorización para que más de seis millones de niños menores de 14 años puedan pasear por la calle a partir de este 26 de abril.
Raúl Tola

«¡Me acuerdo mucho de esto!» Mi hija tiene cuatro años, pero habla igual que esos adultos que vuelven a los lugares donde fueron felices, como el desván de sus abuelos o la playa de sus primeros veranos. Han pasado cinco largas semanas desde la declaratoria de alerta sanitaria y todo este tiempo ha debido permanecer encerrada. Ahora que por fin puede salir, comienza a redescubrir emocionada las cosas que antes le parecían cotidianas, como la puerta de nuestro edificio.

El gobierno español ha dado la autorización para que más de seis millones de niños menores de 14 años —como ella y su hermano— puedan pasear por la calle a partir de este 26 de abril. Las condiciones son bastante estrictas: las salidas se realizan entre las nueve de la mañana y las nueve de la noche, pueden durar como mucho una hora, los chicos deben encontrarse en todo momento bajo la supervisión de sus padres y están prohibidos de alejarse más de un kilómetro de sus casas. Además, tienen que cumplir las precauciones sanitarias habituales, como mantener la distancia de seguridad y evitar posibles focos infecciosos, en este caso bancas, basureros o postes de luz.

La decisión de comenzar a relajar las medidas restrictivas fue tomada ante la caída de los contagios.
La decisión de comenzar a relajar las medidas restrictivas fue tomada ante la caída de los contagios.

Hasta ahora España vivía el confinamiento más estricto del mundo. Para impedir que el Covid-19 se esparciera y saturara el sistema sanitario, los ciudadanos estaban prohibidos de salir a la calle salvo para hacer la compra en el mercado o la farmacia, o para ir a sus trabajos, si estos seguían activos y no podían realizarlos a distancia. La decisión de comenzar a relajar estas medidas fue tomada ante la caída de los contagios y es la primera acción concreta de una desescalada sanitaria de consecuencias inciertas.

En las últimas 24 horas han sido dadas de alta 3,024 personas, más del doble que los nuevos infectados registrados en ese mismo tiempo. El número de muertes, por su parte, es el menor en un mes: 288, una cifra que sigue siendo altísima, pero que no se compara con los peores momentos de la emergencia, en los que morían cerca de mil personas diarias. Si este ritmo se mantiene o profundiza, Pedro Sánchez, Presidente del Gobierno, ya anunció un siguiente paso: permitir que se practique el deporte individual y los paseos en familia a partir del sábado 2 de mayo.

Si se advierte un aumento significativo en el número de contagios y fallecimientos, podría volver al confinamiento total.
Si se advierte un aumento significativo en el número de contagios y fallecimientos, podría volver al confinamiento total.

Sin embargo, al no haber vacuna ni inmunidad poblacional suficiente, el gobierno ha avisado que la transición será objeto de una permanentemente revisión y que, si se advierte un aumento significativo en el número de contagios y fallecimientos, podrían revertirse sus etapas e incluso volver al confinamiento total. También ha pedido que las comunidades autónomas se mantengan atentas al proceso y estén capacitadas para doblar el número de camas de cuidados intensivos si la situación lo requiere.

47 días después…

La vida vuelve a las calles de Madrid después de 47 días de encierro. Salir a pasear un domingo, algo tan habitual antes de la llegada del coronavirus, es una novedad que arranca en cuanto pisamos la calle. Mis hijos han sacado sus bicicletas y comienzan a pedalear primero con inseguridad y luego, a medida que sus cuerpos se van desentumeciendo, con mayor soltura. A partir de ese momento, nuestra misión es perseguirlos para pedirles que no se alejen mucho y eviten a las demás personas.

En la esquina nos cruzamos con otros padres que acompañan a sus niños. Además de los juguetes permitidos, muchas familias vienen uniformadas con mascarillas antisépticas y guantes quirúrgicos y, aunque estamos en plena primavera, se han enfundado en gruesos casacones, pantalones de montaña y botas de leñador. Cruzamos Ferraz, una ancha avenida de un solo carril que parece abandonada y, luego de cien metros, alcanzamos el Paseo del Pintor Rosales, una suerte de malecón que discurre junto a la pendiente de árboles y jardines del Parque del Oeste. Ahí funciona el consulado del Perú en Madrid, cuya persiana metálica está bajada hasta la mitad.

La sensación se enrarece a cada paso. Esta es una zona de restaurantes y bares que solía registrar mucho movimiento los fines de semana. Pero todas las terrazas aparecen abandonadas, con las sillas bocabajo sobre las mesas. Algunos locales que hasta hace un mes funcionaban a toda su capacidad —cuento una pastelería y una pizzería— ahora han desaparecido y en sus fachadas cuelgan carteles de «Se Alquila» o «Se Vende». Lo más probable es que hayan quebrado por falta de clientes.

Decenas, quizá cientos de personas han salido a caminar, tomar el sol y divertirse al aire libre, pero no se percibe el ambiente de fiesta y diversión del pasado. Al contrario, incluso los niños más pequeños permanecen en silencio mientras juegan, como si desconfiaran de algo, se mueven con sigilo y extreman las precauciones para no tropezar con algún desconocido.

Están abiertos los parques, las plazas y las calles, pero no las zonas de juegos infantiles. Cada tanto nos encontramos con estos polígonos de arena que han sido clausurados con cintas de señalización policial, las mismas que han servido para envolver columpios, resbaladeras y subibajas, que confieren a estos espacios otrora lúdicos y alegres la siniestra apariencia de una escena del crimen. Esta empeora con la aparición de una solitaria patrulla de la policía que avanza muy despacio, se detiene en una esquina y perifonea órdenes a los transeúntes.

"Decenas, quizá cientos de personas han salido a caminar, tomar el sol y divertirse al aire libre, pero no se percibe el ambiente de fiesta y diversión del pasado".
"Decenas, quizá cientos de personas han salido a caminar, tomar el sol y divertirse al aire libre, pero no se percibe el ambiente de fiesta y diversión del pasado".

Descendemos por uno de los senderos que cortan el Parque del Oeste y que caen hasta la Rosaleda de Madrid, a un paso del río Manzanares y del Cementerio de la Florida, lugar que Francisco de Goya inmortalizó en su cuadro «Los fusilamientos del 3 de mayo». Mientras nos cruzamos con paseadores de perros, parejas de niños que corretean detrás de una pelota o montan skate-boards, madres embarazadas que empujan triciclos y padres que cargan a sus hijos más pequeños en mochilas portabebés, me llama la atención un hecho en apariencia menor: todos han sacado sus teléfonos y toman fotografías a mansalva.

Entonces cobro conciencia de que también lo hemos venido haciendo mi chica y yo. En la hora de paseo nos hemos hartado de registrar a nuestros hijos jugando a las escondidas, escalando una cuesta, trepando a los árboles, recogiendo flores y ramitas. En ese momento comprendo que en el futuro volveremos con frecuencia a estas fotografías en apariencia banales, que inmortalizan este pequeño paso hacia la plena recuperación de nuestra libertad.

El Comercio mantendrá acceso libre a todo su contenido relacionado con el coronavirus.

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¿Qué es un coronavirus?

Los coronavirus son una amplia familia de virus que pueden llegar a causar infecciones que van desde el resfriado común hasta enfermedades más graves, que se pueden contagiar de animales a personas (transmisión zoonótica). De acuerdo con estudios, el SRAS-CoV se transmitió de la civeta al ser humano, mientras que el MERS-CoV pasó del dromedario a la gente. El último caso de coronavirus que se conoce es el covid-19.

En resumen, un nuevo coronavirus es una nueva cepa de coronavirus que no se había encontrado antes en el ser humano y debe su nombre al aspecto que presenta, ya que es muy parecido a una corona o un halo.

¿Qué es la Covid-19?

La covid-19 es la enfermedad infecciosa que fue descubierta en Wuhan (China) en diciembre de 2019, a raíz del brote del virus que empezó a acabar con la vida de gran cantidad de personas.

El Comité Internacional de Taxonomía de Virus designó el nombre de este nuevo coronavirus como SARS-CoV-2.

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