Donaciones Juguete Pendiente
Heladas Somos
Oscar García

Si algo útil enseñó Marie Kondo, la experta en el orden doméstico y en doblar prendas, es que muchos tenemos más ropa en casa que la que en verdad necesitamos. No nos gusta botar cosas y somos proclives a la acumulación. Ahí están esos pantalones que se conservan solo para el hipotético día en que se baje de peso. O las prendas que se guardan porque el color ya no es el de estación o, simplemente, porqué ya no gustan más. Por desgracia, no todos los peruanos tienen esa oferta en sus armarios. Hay gente que no tiene con qué abrigarse este invierno.

En las alturas andinas, las temporada de heladas afectan a miles de personas cada invierno (729 mil se vieron dañados de alguna manera por el frío, según un conteo hecho el 2018). Hablamos de gente que ve sus cosechas arruinadas, sus animales muertos y que, encima, les toca padecer de frío, día o noche. Lo último es la variable más sencilla de controlar y apenas nos toma un poco de tiempo. Si donáramos esa ropa que ya no usamos (abrigo, calzado, frazadas, medias), podemos ayudar a que alguien lo pase mejor en los próximos meses.

Este mes se acaba de lanzar la campaña “Si no lo usas, ya no es tuyo”, de la asociación sin fines de lucro Juguete Pendiente y Real Plaza, que busca reunir por segundo año consecutivo ropa y abrigo para alrededor de 2.400 familias de las zonas alejadas de Cusco, Arequipa, Puno, Junín, Tacna y Trujillo. El objetivo es reunir 100 toneladas de donaciones y 200 mil prendas (el año pasado se juntaron 78 mil). El esfuerzo es encomiable, pues requiere de una logística impresionante, de transporte y de voluntarios, tanto para la segregación de donaciones como para la red de distribución.

Para este año, la campaña adquiere un tono más lúdico y "viral", muy de estos tiempos. Los organizadores lo han llamado el #5Challenge y funciona a manera de un reto virtual: una persona debe grabarse en un video o tomarse una foto vistiendo cinco prendas que donará a la causa. Ojo, las cinco prendas deben tenerlas puestas al mismo tiempo. Luego, debe compartir esta foto o video en las redes sociales, con el hashtag #5Challenge, etiquetar a Real Plaza y retar a tres amigos a que hagan lo mismo. De esa forma se busca generar una cadena que sea solidaria, que ayude a comunicar el mensaje de ayuda y que sea divertida. 

Esas prendas se pueden donar luego en los centros de acopio que se han dispuesto, sea en Lima (Real Plaza Salaverry, Real Plaza Primavera, Real Plaza Centro Cívico, Real Plaza Villa María, Real Plaza Pro y Real Plaza Guardia Civil) o en el interior (los locales del mall en Huancayo, Arequipa, Cusco, Trujillo y Juliaca).

La vida del voluntario de Juguete Pendiente es exigente. En los meses previos a la campaña de donación se ponen en régimen para bajar de peso. La idea es estar ligeros, algo útil cuando se tiene que caminar tanto. "Tenemos que estar con muy buena forma, físicamente bien, no podemos tener la hemoglobina baja ni nada. Empezamos a correr tres meses antes. Con nosotros pasa algo inverso. Hay gente que se prepara físicamente para el verano, nosotros nos preparamos para el invierno", dice la directora de Juguete Pendiente, Vanessa Vásquez. 

Algo muy importante de recordar es que la caridad y la dignidad siempre deben ir de la mano. La ropa que se dispone para donación debe estar en un estado óptimo. Debe servir. Como recuerda Vásquez, una cantidad importante de la ropa que se dona al año no se puede repartir porque sencillamente es inservible: zapatillas rotas, polos agujereados, hasta pañales desechables sucios les han mandado en bolsas. Es bueno revisar si lo que vamos a entregar tiene vida o una utilidad. 

Las donaciones para Si no lo usas, ya no es tuyo se están recibiendo desde ya en los centros de acopio citados y el primer envío de ayuda se realizará el 7 de julio.  //

DATO: El año pasado, participaron en la campaña 365 voluntarios. Ellos sumaron más de 3,229 horas de trabajo recogiendo, preparando y entregando la ropa. 2,353 familias fueron las beneficiadas.

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