El ser humano tiene una característica muy peculiar, puede convertir un error en una ventaja, permitiéndole ganar de ‘casuela’. Pero parece que esa peculiaridad también puede ser realizada por las computadoras.
En 1997 Gary Kaspárov, campeón mundial de ajedrez de 1985 hasta el 2000, se enfrentó por segunda vez a Deep Blue, una máquina desarrollada para ser la mejor en este deporte de intelecto. Sin embargo, el computador se alzó como ganador, a pesar de haber sido derrotada en un enfrentamiento previo.
Pero nueva información aclararía que este logro no se debió a los avances tecnológicos de la máquina, sino a un error que provocaba que Deep Blue moviera aleatoriamente cuando se veía acorralado, según informa el portal El Confidencial.
Durante la primera de las seis partidas del enfrentamiento, Deep Blue realizó una jugada tan inútil y absurda, en vez de realizar un jaque al rey, que era la jugada lógica.
La victoria de esa primera apartida fue para Kaspárov. Sin embargo, afecto su mente. El ajedrecista pensó que esa jugada aparentemente estúpida debía haber tenido un motivo brillante, es decir, la máquina podía crear estrategias que él no podía predecir. Ideas que lo sugestionaron y pudieron haber llevado a su derrota
Kaspárov se jactaba de poder ver 15 movimientos antes que se realizaran. Al no poder darle una explicación al extraño movimiento de la máquina, el ajedrecista infirió que Deep Blue podía ver más que él, causando que apareciera en su mente la posibilidad de ser derrotado.
“Más tarde descubrimos que era un simple error informático”, explica el entrenador de ajedrez, Bruce Pandolfini, en el documental The Man vs. The Machine.
“Me recuerda al famoso gol de Maradona en el 86”, declaró Kaspárov terriblemente enfadado luego de su derrota. Para el ajedrecista, IBM, creadora de Deep Blue, había hecho trampa.
Si se tratase de un error o no, intimidar psicológicamente a un rival es una táctica muy humana que le valió la victoria a Deep Blue.