Usuarios de la consola Xbox One en Estados Unidos y Reino Unido se quejaron de que un anuncio, protagonizado por el actor Aaron Paul, prende sus consolas sin su consentimiento.
Imagine que está tranquilamente sentado en su casa mirando la televisión y de repente la consola que hay debajo de ella se prende y un videojuego aparece en la pantalla.
Esto es lo que parece haberles pasado a muchos usuarios de la consola Xbox que por casualidad estaban viendo un comercial donde se anunciaba la consola.
En el comercial, en el que aparece la estrella de la serie Breaking Bad, se ve cómo el actor dice "Xbox On" (Préndete Xbox) justo al final.
Esto parece activar el sensor de voz de la consola, lo que provoca que se active ya que el Kinect entonces enciende el aparato.
Un portavoz de Microsoft declinó comentar sobre el caso, aunque aseguró que hubo otros comerciales con comandos de voz con anterioridad.
Mucha gente se apresuró a publicar comentarios sobre el caso en las redes sociales.
Aaron Paul prendió mi consola
"Aaron Paul acaba de prender mi videoconsola a través del anuncio (Lo que hizo también que mi televisor se apagase)", tuiteó Qassim Farid, un bloguero con base en Reino Unido.
Otro británico, Tom Neal, escribió: "@Xboxtu nuevo anuncio es muy molesto. Aaron Paul no deja de prender mi consola, #paraaaaaaaaa."
La discusión también se produjo en el foro de Reddit sobre la Xbox, donde uno de los usuarios comentó: "¡El maldito anuncio sigue prendiendo la consola! ¡Lol!"
El mensaje refleja la actitud de muchos jugadores, que parecen estar más sorprendidos que disgustados por el fallo técnico. Y aunque resulte sorprendente esta no es la primera vez que ocurre algo parecido.
En noviembre el usuario de Xbox Tim Kimberl publicó un video en Youtube mostrando cómo un anuncio en internet que contenía el comando "Xbox ve a Dead Rising 3" activaba el juego en su consola.
Aquellos que se vean afectados por este fallo pueden desactivar el sensor Kinect, lo que impide que la consola responda a las órdenes de voz.
Comercial sin Kinect
El problema surgió en el mismo momento en el que Microsoft comenzó a vender una versión más barata de la Xbox One, sin Kinect.
La compañía aseguró que tomó esta medida ya que algunos clientes comentaron que no deseaban pagar extra por el accesorio.
Esta decisión permite a la compañía vender la Xbox al mismo precio que el que tiene la Playstation 4 de Sony.
En la presentación en el certamen E3 de videojuegos de la semana pasada Microsoft casi no usó el accesorio. Tan solo un juego de baile, otro de Disney y un juego de una compañía independiente llamado Fru parecieron sacar ventaja del Kinect.
Aun así, Microsoft anunció fuera del certamen que un nuevo software permitirá a los programadores acceder a un mayor poder gráfico cuando no se use el Kinect.
Esto podría ayudar a la hora de hacer frente a una queja entre los jugadores de Xbox, que afirman que algunos juegos tienen una mejor resolución en la Playstation que en la consola de Microsoft.
Pero el anuncio parece dejar claro que la compañía estadounidense seguirá promocionando el Kinect como una característica que la distingue de la Playstation, aunque el precio que aparece al final sea el de la versión sin el aparato.