Los reyes de la TV nocturna de EE.UU. se mofan de Donald Trump

El presidente de Estados Unidos Donald Trump, recientemente criticó duramente a Jimmy Fallon y Stephen Colbert, dos de los presentadores más populares de la televisión nocturna de Estados Unidos. La respuesta de los conductores no tardaría en llegar y sería en el habitual estilo desenfadado que los caracteriza.

Durante un mitin político en Carolina del Sur, Trump había llamado "alma perdida" a Fallon, mientras que sobre Colbert dijo que era un "malviviente".

"Lo digo honestamente, ¿esta gente es divertida?", dijo el mandatario en el evento. "Puedo reírme de mí mismo. En serio, si no pudiera estaría en serios problemas, pero no hay talento, ellos no son gente talentosa" y Johnny Carson sí lo era", añadió Donald Trump.

Lejos de ofenderse, los presentadores dejaron atrás su habitual lucha por la sintonía y se unieron burlarse de las palabras de Trump con un gran añadido: Conan O'Brien, otro de sus rivales por la audiencia, también se sumó.

El programa de Stephen Colbert abrió con un curioso chat y videollamada entre este y Jimmy Fallon, donde ambos usaron los apelativos que el presidente usó para ellos.

"¡Hola, malviviente!", dijo un alegre Fallon a su compañero, a lo que Colbert le respondió: "¡Hola, alma perdida! ¿En qué andas?". La conversación siguió en ese tono burlón en el que los conductores se recordaron mutuamente su falta de "talento" y que "debían ser hombres". Esto último en referencia al 'tuit' que Trump escribió a Fallon hace algún tiempo: "Sé un hombre".

Conan O'Brien se unió a la conversación poco después y se mostró sorprendido cuando le dicen quién es el presidente de Estados Unidos. "¿Donald Trump? ¿El tipo de bienes raíces que vende filetes?", comentó este último.

O'Brien –quien dijo estar rasurándose– se refirió de forma jocosa al pedido que Donald Trump hizo en sus primeros meses de gobierno. "¡Denle tiempo, chicos!", dijo el pelirrojo conductor televisivo.

"Por favor, recuerden el civismo, sino somo civiles, esto se puede poner feo", pidió O'Brien a sus colegas.