DIEGO PAJARES (@eldiegock)
Para muchos de los que seguimos “Two and a Half Men” desde sus primeras temporadas, la inclusión en la serie de Ashton Kutcher en lugar de Charlie Sheen fue un despropósito. En otros causó expectativa: Kutcher es un tipo popular y talentoso, no podemos negarlo. Su ingreso le daría un nuevo aire a la serie. Pues, con el tiempo, comprobamos que no fue así.
Ashton Kutcher no elevó el estatus de la serie, sino que la convirtió en cualquier otra comedia de situación. “Two and a Half Men” se transformó en otra cosa. ¡Ni siquiera el nombre tiene sentido desde la salida de Angus T. Jones! ¿Hay forma de que semejante muerto viviente tenga un final digno? Sin pensarlo, alguien diría: “¡Que vuelva Charlie Sheen!”. Sin embargo, ¡su personaje está muerto! Autogol de Chuck Lorre, hoy en día más preocupado por un esperpento llamado “Mom” (inexplicablemente renovada) y su pequeña mina de oro llamada “The Big Bang Theory”.
Otro posible final es el que la propia presidenta de programación del canal CBS reveló: que los personajes de Walden y Allan terminen casados. Esto último tendría coherencia con el rumbo que ha tomado la serie en sus últimas temporadas, explorando el tema de la sexualidad a través de nuevos personajes, entre ellos Jenny, la hija del propio Charlie.
Llegado a este punto quisiera ofrecer una alternativa, como seguidor de la serie desde el comienzo. El final de “Two and a Half Men” tuvo lugar en el episodio 16 de su temporada 8, en el 2011. Fue un final inconcluso, es lo que hay. Luego comenzó una serie con el mismo nombre que ha durado 4 temporadas con algunos nuevos personajes. Un ‘spin off’, llamémoslo. Así todos quedamos contentos.