Andrea Guerra es Directora de Recursos Humanos de la cadena de hoteles Marriott en Perú. Llegó hace 14 años allí. Pero un día llevó su sobre manila con un breve documento impreso para aspirar al cargo de practicante -en su caso, el año 2005- y tuvo que hacer todo lo que hacemos quienes hemos sido practicantes: llevar papeles, escuchar a los más grandes y equivocarse, que de eso se trata cuando uno empieza a trabajar. De eso pasó tiempo ya.
Ahora se reparte entre los 4 hoteles de la cadena donde tiene responsabilidades en Recursos Humanos, agenda citas, tiene reuniones con sus clientes, a quienes ella llama asociados. Y además tiene el tono de voz de quien siempre carga con una buena noticia. ¿Cómo ha sido la carrera de Andrea Guerra desde que terminó sus estudios de Turismo y Hotelería en la Universidad San Martín de Porres (USMP) hasta hoy?
Quizá este breve respuesta la define:
-“Nada de señora Guerra. Quienes me conocen me dicen Andre. Y quienes me vieron llegar al hotel, Andreíta”.
¿Qué coloca en la tarjeta de Migraciones?
Es extraño cómo en un palabra tienes que resumir una carrera. Nunca lo he pensado. Coloco “Administradora”, pero en el día a día realmente mi trabajo tiene que ver con los Recursos Humanos. Mi rol es buscar el bienestar de los trabajadores en relación con la empresa y encontrar oportunidades para todos. Cuando ocurre, realmente ha sido un gran día de trabajo para nosotros.
¿Se entiende mejor hoy el rol del área de RRHH tiene en las empresas?
Sí, se entiende mejor. Antes no se llamaba RRHH sino usaban algo así como “Administración de personal”. Eran trabajos vistos como muy duros. Ha cambiado cómo nos ven los trabajadores. Incluso la forma en que nos relacionamos: para Marriott son “asociados”, para otras empresas son “talentos” o “socios estratégicos”. Nuestro rol es, en ese sentido, diferente. Nuestros trabajadores no se quedan 30 años en la empresa en el mismo sitio: tenemos una línea de carrera para ellos.
¿Cómo fue su línea de carrera?
Tengo 14 años en Marriott y sí puedo decir que la cadena da oportunidades. Empecé como practicante en el área de restaurantes, apenas salí de la universidad. Así fue. Luego pasé al área operativa de selección. Luego fui asistente de departamento de Recursos Humanos, coordinadora de departamento y luego gerente de capacitación, que fue mi primer cargo importante. En 2012 fui a Cusco y viajé como gerente de Recursos Humanos para abrir el Marriott de esa ciudad. Fue la primera gran prueba de mi carrera pues iba a liderar un equipo desde cero. En 2 años volví a Lima para ocuparme del cargo de Directora de Recursos Humanos de toda la cadena. Hoy por hoy veo el hotel de Cusco, el JW Marriott, el Courtyard y desde hace un par de años el Sheraton de Lima.
¿Se ha puesto a pensar dónde estuvo la clave de su crecimiento? No todos pueden cruzar la cadena alimenticia, por llamarlo de alguna forma, desde practicantes a gerentes.
(Risas) Es un 50-50, yo creo que sí. Como trabajador uno tiene que estar pendiente de encontrar las oportunidades. También dejar su zona de confort: así me fui a Cusco, por ejemplo. Más que diseñar un plan de carrera, debes tener la mira muy clara, tener buenos mentores para encontrar cambios de desarrollo. Y el otro 50% es del lugar donde trabajas: si no fuera una compañía que apueste por el talento, donde todo se puede aprender, nadie podría crecer. Lo que más valoramos aquí es la actitud de las personas.
¿Es muy complicado para una mujer acceder y conservar un cargo de este tamaño?
Marriott da muchas oportunidades y apuesta por la diversidad. Tenemos, por ejemplo, diferentes frentes: inclusión, discapacidad, LGTBI, mujeres. Como profesional, a veces sí, a pesar de que existen estas condiciones puede ser difícil porque uno tiene que sortear diferentes situaciones que no son equitativas. Considero que hay muchas empresas que hacen todos los esfuerzos pero no es suficiente. Sí creo que hay sectores donde se no es tan fácil encontrar esa equidad. Como país nos falta mucho. Estmos lejos de lograr las metas, más que de cuotas de género, 50-50, de que la mujer tenga participación, voz y voto, que tenga opinión. El rol de la empresa es dar el mejor escenario para ello.
¿Cómo se trabaja eso en Marriott?
Más que de cuota, nosotros nos preocupamos en la diversidad. Cuando tenemos un cargo por un ocupar, la terna debe tener hombres y mujeres. El tema va más allá del género, se trata de que el profesional que llegue a ocuparlo sea el mejor, el más capaz, el mejor talento. Lo que se trata, y esa es nuestra tarea, es que las mujeres puedan llegar a tener las mismas oportunidades para llegar a la parte final de ese proceso.
¿Cómo la llaman en la empresa? ¿De tú o de usted?
Normalmente me dicen Andre. Y quienes me han conocido de muy chica, cuando ingresé a trabajar, Andreíta. Cuando alguien me llama por mi apellido me siento muy raro. Me gusta que me digan Andre.
MÁS DE ANDREA GUERRA
Con más de 12 años en el rubro de hotelería, Andrea Guerra realizó sus estudios de pregrado en la Escuela Profesional de Turismo y Hotelería de la Universidad San Martín de Porres (USMP). Posteriormente consiguió méritos académicos tales como Master Coach del programa Coaching y Liderazgo por la Escuela de Postgrado Universidad San Ignacio de Loyola y Máster en Recursos Humanos por la EUDE (Escuela Europea de Dirección y Empresas). Hoy es Directora de Recursos Humanos Marriott International en Perú.