Cuidado especial: aprende a tener una iguana como mascota

Actualización / Viernes 26 de junio 4:30 pm. / Es importante considerar que el Minagri asegura que la iguana bebé es un animal silvestre y no se recomienda tener como mascota.

Sin dudas, cuando piensas en tener una mascota lo primero que se te viene a la mente es un perro o un gato. Sin embargo, puede ser posible que quieras tener un animal poco común y finalmente te decidas por adquirir una iguana. Este reptil de sangre fría necesita cuidados especiales para poder vivir de una buena manera.

- Debe tener acceso a los rayos solares

Las iguanas necesitan la luz solar para así absorber los rayos UVB y UVA, pues estos son muy importantes para que el animal digiera de manera correcta su comida y pueda asimilar la vitamina D.

- Aliméntala con plantas y frutas

Las iguanas son animales que se alimentan con hojas de diferentes plantas. Existe una gran cantidad de hortalizas que puedes darle para armar una buena dieta. Coloca hojas de nabo, tréboles silvestres, diente de león, espinaca, acelga, brócoli, coliflor y perejil. También puedes colocar, en menor cantidad, algunas frutas como mango, papaya o fresas.

- Prepara un hogar adecuado

Recuerda que la iguana es un animal al que le gusta correr y moverse constantemente, por lo que debes armarle una jaula grande. Un lugar con 1 metro de profundidad por 2 de ancho y 2 de alto puede ser adecuado. No olvides colocar algunas ramas en el interior, pues al reptil le gusta escalarlas y treparlas.

- Colócale una bandeja con agua

Además del plato de agua que debes colocarle a tu mascota, es necesario que cuente con una pequeña bandeja, pues a las iguanas les gusta meterse a nadar y a hidratarse. No olvides de cambiar el agua todos los días, pues en algunas ocasiones la usan para hacer sus necesidades.

- Tu iguana debe contar siempre con el calor necesario

Debes tener en cuenta que este tipo de animales provienen de climas cálidos y por lo tanto, deben siempre tener el calor adecuado para vivir bien. Recuerda que los rayos solares no son sinónimo de calor. Lo ideal es colocar una lámpara en y un termómetro. Asegúrate de que esté normalmente entre 26 y 30 grados.