Cada vez queda más claro: el vestido de novia ideal es aquél que representa tu personalidad hasta en el mínimo detalle. Dejando atrás lo clásico del color blanco y la elegancia de la falda vaporosa, ahora las tendencias bridal del 2018 ponen sobre todo lo alto a las transparencias, los estampados florales, el encaje, los escote pronunciados y- a una de las últimas novedades- el tono rosa.
Aunque meses anteriores ya habíamos visto el tono nude y crema apoderándose de las tenidas usadas por las novias, la ola rosa nos toma por sorpresa. La primera pista de esta tendencia la dio el vestido creado por Valentino para la heredera de la multinacional textil, Inditex, Marta Ortega. La celebridad se casó, la semana pasada, con Carlos Torretta, luciendo un conjunto dos piezas largo de tono rosa pálido compuesto por una blusa plisada y una maxi falda. La gama de color se repite en un segundo vestido de Ortega de corte strapless, lazo en la cintura y falda con volumen. Rosa por doquier.
La tendencia la repite Mandy Moore, la actriz estadounidense. Este domingo, Moore se casó con el músico Taylor Goldsmith vistiendo un bridal dress firmado por Rodarte, el look número 42 de su colección Primavera 2018. El vestido es de tono rosa, lleva volados en el cuello y la falda, puntos blanco como estampado y un adorno de flores a la cintura que define la silueta. Una opción romántica e inusual.
La actriz llevó el tono rosa no solo en su vestido, sino en su velo,tacones y maquillaje también. Esta similitud de color en los vestidos de ambas personalidad solo significa una cosa: la tendencia bridal se viste de rosa esta temporada.