Andrea Carrión / WUF
Llegó el fin de año, época de lonches navideños, intercambio de regalos, compras por montón y viajes. Si para las personas diciembre es un mes singular, para nuestras mascotas lo es aún más, especialmente si los planes los hacemos varios días lejos de casa.
Para minimizar el estrés que nuestros perros, gatos, conejos, aves, hurones, peces, entre otros, sienten cuando nos alejamos de ellos por un tiempo prolongado, lo mejor es planificar bien con quién se quedarán. Hoy más que nunca existen compañías que ofrecen servicios profesionales para el cuidado de tu mascota y siempre es mejor dejarlos con una buena lista de observaciones y recomendaciones, en caso sea necesario.
Aquí algunos consejos para hacer de tu separación temporal una experiencia sana y agradable para todos.
Haz bien tu tarea
Para saber dónde se sentirá más cómoda tu mascota cuando esté lejos de ti, es importante que averigües bien todas las opciones de alojamiento que tienes a la mano. La decisión deberá estar basada en el tipo de animal, edad, condición física, nivel de energía, necesidades y personalidad.
Hay perros amigables y sociables, por ejemplo, que son felices en aquellos hospedajes que ofrecen largas horas sin correa y al aire libre en jardines con piscina y juegos. Sin embargo, hay aquellos que son más tímidos y que espacios así los pueden estresar. Elije bien el lugar según el carácter de tu mascota.
Alimentación
Una vez que hayas elegido el individuo o alojamiento en donde se quedará tu mascota, planea bien su lonchera. Generalmente, los animales domésticos se estresan cuando los sacas de su ambiente y su rutina, y eso suele verse reflejado en su apetito. Además de su alimento regular, incluye algo sabroso como atún, paté o algo que sea irresistible para ellos.
Medicinas
Si tu viaje o salida de paseo coincide con algún tratamiento que esté recibiendo tu mascota, compra la cantidad exacta de medicamentos y detalla en una lista las horas y cantidades que debe de recibir. También menciona si éstas deben darse con o si comida. Ah, no te olvides de incluir la información de contacto de su médico veterinario.
Sensibles al verano
Hay ciertos tipos de perros con los que hay que tener mucho cuidado cuando la temperatura sube. Están aquellos de nariz chata –los braquicéfalos-, los que conocemos como Bulldog Inglés, Bulldog Francés, Pug, Boston Terrier, Bóxer, Shih Tzu, Lasha Apso, Pequinés y variaciones de estas razas. Asegúrate de advertirle a quien se quede con tu perro de tener cuidado con las horas más calurosas del día. Debe de tener mucho cuidado al dejarlo correr, jugar o someterlo a ejercicios físicos demasiado fuertes. Para estos perros, el sobrecalentamiento corporal es un problema real y podría sufrir un golpe de calor, situación que puede llegar a ser mortal.
Y si tienes uno de aquellos animales que no tienen pelo, que tienen poco pelo o tienen piel sensible, recuerda empacar protector solar y advertirle a quien lo cuide de aplicarlo cuando esté al aire libre.
Qué empacar
Una forma de reducir la ansiedad de separación es enviar a tu mascota con objetos que le sean familiares, como su cama, algún juguete, su plato de agua y comida. También es buena idea incluir alguna prenda de vestir de alguien de la casa, el olor hará que tu mascota te extrañe menos.
Ni perro ni gato
Si tu mascota entra en la categoría de aves o roedores, asegúrate de que en su alojamiento u hogar temporal no haya niños que puedan perturbar su paz ni animales con los que se sientan amenazados.
Las aves suelen estresarse en lugares extraños y caóticos. Son animales que necesitan de seguridad, consistencia y sobretodo atención. Si vas a salir de casa unos días, asegúrate de dejar tu ave con alguien conocido que se mude a tu hogar por el tiempo que estarás fuera o, de no ser esto posible, déjala con una persona amorosa y atenta que tenga experiencia en cuidado de aves.
Los gatos, por su parte, también son seres de rutina y prefieren quedarse en su ambiente. Dejarlos sueltos en un lugar extraño puede provocar que huyan y busquen volver a casa.
Mascotas bebé
Si todavía están en periodo de entrenamiento y necesitas salir de casa por unos días, elige muy bien con quién dejarás a tu mascotita. Los cachorros necesitan tiempo y atención, pero sobretodo paciencia y muy buen humor. Suelen ser destructores, hacer bulla y escoger la alfombra más cara para hacer sus necesidades, algo con lo que muchos humanos no comulgan. Para evitar enemistades o expulsiones innecesarias, sé muy directo con el potencial cuidador y asegúrate que esté de acuerdo en cubrir todas las necesidades de tu mascota.
Al margen de dónde vayas o cuánto tiempo estés lejos de casa, lo importante es asegurarte de que el lugar en donde se quede tu mascota sea seguro, consistente con su rutina y que tenga personas amorosas y sensibles a sus necesidades y a cualquier eventualidad. Esto no solo le dará bienestar a tu mascota, sino que además te dará tranquilidad en donde sea que estés.