Por Andrea Carrión / WUF
Seguro que varias veces te has arrugado de ternura cuando ves a tu perro sobarse la cara con sus patas delanteras. Si bien la escena es encantadora, más vale poner atención pues podría tratarse de una condición llamada queratoconjuntivitis seca, comúnmente conocida como ojo seco.
De acuerdo con la especialista en medicina de animales de compañía y oftalmología veterinaria, la Dra. Michelle Freundt, cada vez es más común atender pacientes que presentan síntomas relacionados con esta condición.
“Es la enfermedad de moda, perros de todas las edades lo presentan y esto, en muchos casos, se debe a que hay cruces frecuentes de perros con esta enfermedad autoinmune y termina siendo heredada”, explica Freundt, quien agrega que además hay otras causas que pueden interrumpir la lubricación del ojo.
El síndrome del ojo seco es caracterizado por una deficiencia en la película lagrimal, lo que trae como resultado sequedad e inflamación severa de la cornea (la parte transparente del ojo) y de la conjuntiva (la membrana que cubre la parte blanca del ojo).
“Se presenta conjuntivitis, secreciones abundantes y con el tiempo se deposita pigmento negro y éste disminuye la visión”, comenta Freundt. “Un perro con ojo seco no tratado corre el riesgo de contraer infecciones crónicas y heridas hechas por ellos mismos al rascarse que generen úlceras profundas. Cuando ocurre esto último, puede haber perforación del ojo y hasta pérdida de la visión pues al haber sequedad, el cierre de heridas en el ojo es mucho más lento”, agrega.
Esta condición es muy común en perros que tienen los ojos “saltones” como el Pug, Yorkshire Terrier, Bulldog, Bulldog Francés, Cocker Spaniel, West Highland Terrier, Lhasa Apso y Shih Tzu, pero no es exclusivo de estas razas.
“Cada vez más se reproducen padres con este problema. Las razas que están más predispuestas producen poca lágrima y al tener los ojos más expuestos, esta poca lágrima se evapora con más facilidad que en un Doberman, por ejemplo”, explica Freundt. “Y encima Lima, por tener altos grados de radiación y por tener tanto polvo, empeora la situación”.
SÍNTOMAS
-Legañas y/o secreciones abundantes.
-El perro se frota el ojo con el piso, con los muebles o pasa sus patas por la cara.
-Vasos capilares inflamados.
-Parpadeo excesivo.
-Cambios en la cornea.
CAUSAS
-Comportamiento anormal del sistema inmune.
-Causas congénitas.
-Inducido por uso de medicamentos, como anestesia, por ejemplo.
-Toxicidad por uso de medicamentos.
-Inducido por rayos X.
TRATAMIENTO Y RECOMENDACIONES
-Aplicar lágrimas artificiales y usar antibióticos si hay infección.
-Mantener limpia la zona del ojo y el pelo cortado en razas de pelo largo.
-Realizar un control oftalmológico anual, por lo menos a partir del quinto año si no hay síntomas.
-Es un tratamiento de por vida y si olvidamos poner las gotas uno o dos días, el perro volverá a presentar secreción.
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Especialista en medicina de animales de compañía.
Diplomado en oftalmología Veterinaria.
Microcirugía y cirugía de catarata en caninos y felinos.