OSN cerró destacada temporada 2014
Por Gonzalo Tello (Ópera Perú)
No creo equivocarme al decir que este 2014 la OSN ha presentado una de sus temporadas mas destacadas e importantes en décadas. Esto considerando el nivel de interpretación mucho mas parejo y con excelentes resultados que se han logrado, el cuidado en la programación que ha presentado obras exigentes y la alta calidad de los solistas que se presentaron, de gran nivel internacional.
El pasado 10 de diciembre la OSN celebró sus 76 años de existencia. Dirigida por su titular Fernando Valcárcel, presentaron un programa variado y exigente como ya es costumbre. Sin embargo, tuvo un toque de clase con importantes compositores del siglo XX. Como invitada llegó la pianista rusa Lilya Zilberstein, solista de primer nivel que debutó con la Filarmónica de Berlín, dirigida por Claudio Abbado y es frecuente con las mejores orquestas del mundo, además de haber interpretado junto a grandes estrellas como Martha Argerich o Maxim Vengerov.
La OSN comenzó el programa con una segura obertura de “Candide” de Bernstein, obra compleja que requiere mucha vitalidad y dinámica. SI bien la orquesta no se caracteriza por tener pasajes demasiado virtuosos ni rápidos, interpretaron una versión segura y compacta de esta obra, con una batuta firme de Valcárcel, aunque hubiera gustado mas audacia.
Zilberstein interpretó el famoso y muy ejecutado en nuestro medio segundo concierto para piano de Sergei Rachmaninov. Su interpretación fue sublime, lírica, muy romántica y con tiempos lentos que la orquesta supo acompañar. Supo deshilachar las notas de una manera etérea con un resultado especial. El cierre fue portentoso.
La orquesta continuó con dos grandes obras del siglo XX: El famoso Preludio a la siesta de un fauno de Claude Debussy y La Valse de Maurice Ravel. Con Debussy la orquesta mostró el camino por el que ha ido durante este tiempo, con un sonido brahmsiano y de equilibrio atmosférico. En cambio, la obra de Ravel nos dió un sonido potente con elegante gracia desde cuerdas a metales, y dos arpas encantadoras.
Este año hemos visto eventos importantes, con intérpretes de la talla de Javier Perianes, Garrick Ohlsson, Carlos Prieto, Lilya Zilberstein y Jesús Castro Balbi, por mencionar algunos. Y directores de la talla de Krzsysztof Penderecki, Rossen Milanov, Ramón Tebar y Fabio Mechetti, quienes dieron los conciertos mas exitosos en calidad interpretativa.
Se dieron importantes eventos, entre los que vale destacar especialmente el estreno del Concierto para violín y orquesta del peruano Sadiel Cuentas, de una bella melodía y orquestación, con la interpretación a cargo de Carlos Johnsson y dirección de Pablo Sabat; Javier Perianes con un bello concierto para piano de Grieg; el estreno en Perú del concierto para cello “Señor de los Aires” del peruano Jimmy López, así como la interpretación de “Atmósferas” de Ligeti y la “Sinfonía Alpina” de Richard Strauss, a cargo del búlgaro Rossen Milanov. Fabio Mechetti dirigió la imponente Sinfonía no. 3 de Mahler, con Josefina Brivio, Coro Nacional y Coro Nacional de Niños. Destacó también el “Réquiem Alemán” de Brahms, durante semana santa, dirigido por Valcárcel, quién también brindó una espectacular versión del Preludio y Muerte de Amor de “Tristan und Isolde” de Wagner. Valcárcel también dirigió el estreno en Perú de la Novena Sinfonía de Mahler, compositor muy presente en los últimos años y del que vamos a escuchar mas en 2015.
Importante fue también el homenaje al compositor peruano Celso Garrido-Lecca durante el año, programando varias de sus obras, con intérpretes ejemplares como el guitarrista Luis Orlandini.
El evento del año fue sin duda la llegada al Perú de Krzysztof Penderecki, el compositor vivo mas importante de nuestro tiempo y del siglo XX, uno de los protagonistas del Avant Garde de los 50s. Dirigió su famoso Treno para las víctimas de Hiroshima, así como el Coro “Agnus Dei” acapela y el Adagio de su Tercera Sinfonía. Ese concierto despertó el interés de muchos jóvenes, que luchaban por entradas ese mismo día, ya que se habían agotado. Un excelente indicador de lo vigente y atractiva que es la música contemporánea y lo importante que es programarla a un alto nivel artístico. Fue un evento de gran valor histórico.
La OSN tuvo también intercambios con la música popular peruana, acompañando a Tania Libertad, Lucho Quequezana y Jean Pierre Magnet, saxofonista con el que la orquesta viajó a Bogotá por primera vez en décadas para una presentación especial. Este tipo de acercamiento es positivo pues aproxima la orquesta a otros públicos, y permite captar nuevos seguidores.
Como dije, 2014 ha sido un excelente año para la OSN. Se han programado obras exigentes y se ha creado un ritmo de trabajo interesante, con carteleras atractivas para todos. Ha logrado cautivar a un público que va en gran medida a sus conciertos de los viernes y que disfruta y comenta sus presentaciones.
Sin embargo, a la orquesta le falta todavía un trecho largo hacia la excelencia. Para ser competitiva a nivel regional e internacional hace falta, en mi opinión, mejorar su unidad y virtuosidad. Deben ser capaces de interpretar obras mas brillantes con seguridad y fuerza, y no con timidez. Resultados tibios a fríos como la ópera “L´elisir d´amore” y el ballet “La bella durmiente” deben dar cuenta de que aún se debe trabajar mucho en ese aspecto.
Ya Valcárcel ha adelantado que el próximo año tendremos varios estrenos locales y la llegada de grandes solistas. Esperemos que la próxima temporada mantenga y mejore los resultados actuales. Ópera Perú eligió a Valcárcel como Músico del Año 2013 por sus excelentes resultados al frente de la OSN.